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Solo uno de cada cuatro adultos pasa las pruebas para obtener el carné profesional

Realizaron los exámenes unos 300 profesionales en la edición de 2015, cifra inferior a los 800 interesados en la certificación en 2010 -De los presentados, aprobaron 73

Revisión de la fachada de un edificio en Vigo. // R. Grobas

Solo uno de cada cuatro adultos candidatos a hacerse con un carné profesional con el que acreditar su experiencia laboral durante años aprueba los exámenes establecidos por la Administración para repartir estos títulos. En la edición de 2015 participaron algo más de 300 profesional, trabajadores normalmente sin titulación formal pero con muchos ejercicios de experiencia que necesitan acreditar con un documento oficial. Solo 73 resultaron aptos, tras los exámenes realizados en centros de Formación Profesional de Galicia, por norma general.

Para el carné profesional de instalaciones térmicas de edificios, una de las modalidades que incluye este tipo de habilitación profesional pensada para adultos con experiencia en dicho oficio, pasaron las pruebas cinco personas de las 28 interesadas en la certificación. En el caso de instalador de gas pasaron unas 10 personas y para operador de guindastre, ninguna.

Es que, además de la experiencia práctica, para pasar los exámenes es necesaria preparación teórica previa. Los controles suelen constar de dos partes : "una tipo test, con 25 cuestiones y otra prueba, la práctica, que depende de la especialidad elegida por el profesional que pretende obtener el título de su oficio". La meta suele ser competir en el mercado con algún tipo de documento oficial, para hacer currículo. De hecho, durante los años en los que más se notó la crisis, eran muchos más los profesionales que se apuntaban para intentar acceder a habilitaciones y carnés profesionales.

Pero cada especialidad tiene sus propios requisitos. Algunas exigen título de ESO y un curso teórico y práctico impartido por un ente acreditado por la Administración autonómica. Es el caso, por ejemplo, del carné profesional en instalaciones térmicas de edificios. La normativa pide ser "mayor de edad, haber superado un curso de conocimientos básicos y otro sobre conocimientos específicos en instalaciones térmicas".

Cursos y psicotécnicos

Otro de los requisitos es acreditar una experiencia laboral de al menos tres años en una empresa instaladora o de mantenimiento, como técnico. Para operador de guindastre torre la Administración autonómica pide el título de ESO y superar un examen médico, psicotécnico y físico específico para este tipo de actividades, incluyendo prueba de agudeza visual, sentido de la orientación, equilibrio y aptitudes psicológicas".

Una de las especialidades más solicitadas por los profesionales con experiencia en el oficio es la de operador industrial de calderas y de gas.

Las cifras de los últimos ejercicios indican que ha ido bajando el interés de los profesionales para hacerse con una acreditación profesional. En las primeras convocatorias de este tipo de exámenes había más profesionales pero la demanda ha ido bajando. Por ejemplo, cinco años atrás el número de interesados alcanzaba los 800 sin embargo en 2014 esta cifra ya se rebajó hasta los 400.

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