La preocupación vecinal y ecologista ante la anunciada implantación de una incineradora de basura en el municipio de O Irixo ha llegado a los púlpitos de las iglesias. Tras el posicionamiento público del Arciprestazgo de Carballiño-Orcellón contra el proyecto en la manifestación del pasado sábado, los curas de las 42 parroquias del entorno confiesan su "obligación moral" de informar a sus feligreses de lo que está ocurriendo en O Irixo: "Les pedimos que pregunten y que se informen porque si la planta causa daños, no la queremos", explica el sacerdote de O Carballiño y arcipreste, José Benito Sieiro.

Aclara que no se trata de "manipular" a los fieles, ni de crear opinión contraria a la incineradora, sino de que "reflexionen". Sieiro defiende que los vecinos del entorno necesitan datos para "analizar" y critica que el alcalde de O Irixo, Manuel Penedo, haya propiciado que la Xunta autorice la construcción de la planta en este municipio "sin informar antes ni después a los vecinos".

Así se han expresado los párrocos de la zona en sus misas de Reyes y del pasado domingo. "Es normal que estemos preocupados", señala Sieiro, "y del mismo modo que nos preocupamos por los pobres y los enfermos, también lo hacemos por algo así. La Iglesia siempre pide para que los problemas se resuelvan lo mejor posible".

Otro de los curas que no duda en posicionarse contra la incineradora es el de Loureiro, Cangas y Corneda, en O Irixo. Antonio González encabezó a la manifestación del sábado agarrando la pancarta y proclamó su decepción con el alcalde por megafonía. "Me posiciono abiertamente contra los que piensan que esto es un corral", dice.

Este párroco, fundador ahora jubilado de la cooperativa de productos lácteos ecológicos Santa Mariña de Loureiro, aclara que sus mensajes contra el proyecto en la iglesia los hace al término del oficio religioso. "Hay que diferenciar una cosa de la otra, pero siempre me dirijo a ellos en el templo porque es cuando los tengo a todos juntos", explica. "Mi obligación es informarles y siempre fue así, solo quiero que se pregunten por qué nos tienen que contaminar ¿acaso somos los parias de la sociedad?", añadió.

El cura de Loureiro en la misa de Reyes y aprovechando un bautizo habló de la incineradora: "No pido para mí, que me quedan tres o cuatro año, pido por este niño ¿qué le vamos a dejar?". A continuación expuso su desconfianza ante el proyecto, preguntándose "si es verdad que no contamina, ¿por qué no la construyen en la ciudad y se ahorran los gastos de transportes?". González reconoce que sus feligreses tienen miedo porque aquí no son libres. "Yo solo les digo que lo sean", soltó.

Moción en la Diputación

Por otra parte, la Diputación Provincial de Ourense debatirá este mes por segunda vez una moción de la oposición contra la incineradora. A pesar de que el grupo de gobierno del PP ya manifestó su apoyo a la planta en el pleno de diciembre, el PSOE ha registrado una nueva propuesta siguiendo la pauta marcada por el Concello de O Carballiño (PP), que aprobó de forma unánime manifestarse en contra de la planta.

Los socialistas creen que el apoyo del alcalde Argimiro Marnotes pudo ser "de cara a la galería" y temen que la Diputación ratifique su apoyo a la Sogama del sur con el voto del propio Marnotes, que también es diputado provincial.

El portavoz del grupo provincial del PP, Plácido Álvarez, no quiere adelantar la intención de voto del partido "mientras no conozcamos el texto de la moción", si bien defiende que su compañero Marnotes mostrase su desacuerdo con la construcción de la planta. "Yo haría lo mismo", dice Álvarez, que también es alcalde de Muiños. "Hay que ver que Marnotes está en una posición delicada como concello limítrofe. Supongo que su decisión fue meditada después de escuchar a los vecinos", añadió el dirigente popular.