La deuda que acumulan las comunidades autónomas no deja de crecer. A 30 de junio, según los datos publicados ayer por el Banco de España, en el conjunto de las autonomías llegó a los 133.172 millones de euros, lo que supone alcanzar un nuevo récord y aumentar un 23,5% con respecto al mes de junio del pasado año. La causa principal, motivada por la crisis, es que se recurre a créditos para aumentar la capacidad gasto ante el descenso de los ingresos ordinarios en una cantidad muy superior a la que se destina a amortizar los préstamos de años anteriores. El comportamiento de Galicia no difiere del resto de comunidades. Su deuda se incrementó en un 23,5% en el último año, al pasar de 5.604 a 6.923 millones de euros (1.319 más), lo que hace que alcance su máximo histórico, doblando la cantidad que la Xunta debía a mediados del año 2008.

La deuda de Galicia es la quinta de mayor volumen por comunidades en un ránking que encabeza Cataluña con 38.530 millones de euros, tras la que se sitúan Valencia, con 20.547 millones, Madrid (14.789) y Andalucía (13.545). Pero ninguna de ellas figura entre las comunidades que más incremento han registrados en el último año en términos porcentuales. La que más fue Cantabria, con una subida del 75,3%, seguida de Extremadura (50,4%), Asturias (49,4%), Murcia (48,8%) y Castilla y León (46,9%).

La Xunta no hace una mala lectura del incremento de la deuda. La Consellería de Facenda, argumenta que la comunidad gallega se mantiene por debajo de la media española en endeudamiento, con un ratio del 12,3% sobre el PIB, una décima menos que el conjunto y a pesar de acelerar la ejecución de su programa anual de emisión de deuda para lograr mejores condiciones financieras.

Así, a 30 de junio, la Xunta ya había colocado unos 900 millones de euros, el 73% de su objetivo para todo el año, "lo que demuestra que los mercados financieros siguen considerando esta comunidad solvente y fiable", destaca el departamento de Marta Fernández Currás.

La consellería recuerda además que la calificadora Standard & Poors acaba de mantener el rating de Galicia en AA-, al considerar que el Gobierno gallego mantiene un "fuerte compromiso" con los objetivos de consolidación fiscal.

En el conjunto de las comunidades autónomas, con un incremento del 23,5% hasta los 133.177 millones de euros, los datos muestran que desde el año 1995, el endeudamiento de las regiones no ha parado de crecer, batiendo en cada ejercicio récords históricos, a pesar del compromiso de estabilidad presupuestaria adquirido en los últimos años.

La deuda total de las Administraciones Públicas aumentó un 16,5% en el segundo trimestre al situarse en 702.806 millones de euros, lo que supone el 65,2% del PIB.

Cataluña con 38.530 millones de euros, acumula el 28,9% de toda la deuda autonómica, que pasa a ser el 55,4% si se suman los débitos de Valencia y Madrid. Por la parte baja de la tabla figuran Extremadura (2.017 millones), Navarra (1.994), Asturias (1.956), Cantabria (1.196) y La Rioja (910).

Pero tomando como indicador el peso de la deuda en relación al PIB, la Comunidad Valenciana vuelve a situarse en cabeza de la deuda autonómica, con un volumen que alcanza el 19,9% de su Producto Interior Bruto, seguida de Cataluña (19,2%), Castilla-La Mancha (17,2%) y Baleares (16,9%), todas ellas por encima de la media (12,4%).

Por su parte, las corporaciones locales arrojaron una deuda de 37.640 millones de euros a 30 de junio, el equivalente al 3,5% del PIB, lo que representa un aumento de solo un 3,06%. Del total de la deuda de las corporaciones locales, la mayor parte (29.503 millones) corresponde a los ayuntamientos, con un incremento del 0,48%, y de esta cifra, 14.737 millones pertenecen a capitales de provincia. La deuda de los ayuntamientos de más de 500.000 habitantes (Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla, Valencia y Zaragoza) alcanzó los 10.772 millones de euros, lo que supone un descenso del 0,18%.