Apenas nueve meses pasaron desde la primera gran comparecencia pública de la cúpula de Novacaixagalicia tras su fusión, precisamente para anunciar, entre otras cosas, el nombre elegido para el bautizo. La entidad está a punto de salir de su inmediato segundo embarazo, esta vez para convertirse en NCG Banco, como irremediable trámite para cumplir los requisitos de solvencia impuestos en la reestructuración financiera y abrir luego sus puertas a inversores privados y una nueva inyección del FROB, ahora como accionista. La inmensa mayoría de las sucursales lucen todavía las viejas marcas, en función de su origen, y salvo los carteles de los últimos productos lanzados y algún material de papelería, el cambio de look no llegó a formalizarse. ¿Y ahora que la caja única gallega vivirá otra transformación histórica? No hay una decisión tomada. Un ejemplo más de que Novacaixagalicia quiere un cambio tranquilo, que, aseguran, en nada afectará a los clientes.

"Hay tres posibilidades", explican desde la entidad. Que NCG Banco empiece a operar como hasta ahora, una fórmula "intermedia" que simplemente apueste por incluir el cambio de naturaleza en el nombre, o buscar una nueva denominación. "Se están estudiando todas. La marca es un aspecto importante. Pero habrá que esperar", señalan en la caja.

Principalmente, porque todas las decisiones que se puedan tomar ahora en estrategia –y la política de marketing es una de las principales– dependerá del consejo de administración del banco, en el que, además de Novacaixagalicia, estarán desde septiembre los inversores y el Estado con la participación que cada uno reúna en función de las acciones que compren. "Todo se resume –señalan las mismas fuentes– en que no habrá cambio de ningún tipo en el arranque, salvo los datos registrales y fiscales".

Los primeros consejos de administración de NCG Banco tendrán que marcar la pauta del negocio. "Por lo que se está viendo en estos momentos, Castellano y todo el equipo ven incluso potencialidad de crecimiento en Galicia para superar la cuota de alrededor del 43% que tenemos. Hay una base fuertes de clientes y puede ser mayor", aseguran. Pero habrá que establecer cómo la entidad se dirige a ellos, el camino que toma el área comercial o las oficinas.

El cambio de naturaleza jurídica implica, teóricamente, cambios en la operatividad. Las comisiones en cajeros por movimientos entre una entidad de ahorros y un banco son diferentes. Hasta ahora, Novacaixagalicia trabajaba con Red 6000. O los tiempos de espera para los clientes, con un día de diferencia en hacer efectivas las transferencias. "Todo se va a mantener como hasta ahora", aseguran, rotundos, desde Novacaixagalicia. Sin coste para el usuario. El mismo mensaje que se lanzó durante la integración de Caixanova y Caixa Galicia.

Uno de las ventajas en el lanzamiento de NCG Banco es la conclusión de la integración, nueve meses antes de lo previsto, tecnológica. Lo que verdaderamente marca el ritmo interno en las oficinas, porque controla todos los movimientos, y una vía de ahorro de las más importantes. Las sinergias sumarán 72 millones en cuatro años.