Aunque Galicia bate récords de peregrinos este año, tanto el líder del PP, Mariano Rajoy, como el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, echan en falta a uno en concreto: el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. En un acto celebrado en Soutomaior (Pontevedra) para conmemorar el inicio del curso político, el dirigente nacional de los populares atacó al Ejecutivo español por "olvidarse" de ayudar a promocionar el Año Santo. "Un presidente del Gobierno tiene la obligación de venir, piense lo que piense", censuró. Con la misma contundencia se manifestó el máximo responsable del PP gallego: "es la muestra más clara de la indiferencia y el desinterés del Ejecutivo hacia Galicia". Una actitud con la que, según Feijóo, intenta "pisotear" a la comunidad autónoma.

Ni en la apertura de la Puerta Santa, ni en el Día de Galicia ni haciendo un tramo del Camino de Santiago. El presidente de la Xunta y del PPdeG enumeró una a una las citas importantes de este Xacobeo y llegó a la misma conclusión: "Zapatero no ha pisado Galicia pero intenta pisotearla, no pisó el Camino de Santiago pero quiere pisotear el Xacobeo", sentenció, al tiempo que hacía extensible esta crítica a la actitud del Gobierno con respecto a la fusión de las cajas gallegas. "Y ahora quiere hacerlo también con la igualdad y la solidaridad de las cuentas públicas dando a algunas comunidades más y a otras menos", añadió.

A pesar de la falta de apoyo del Gobierno que denuncian los populares, Rajoy ensalzó el trabajo de la Xunta en la organización del "Jacobeo" con J. "Estamos orgullosos. Los datos son muy positivos", aseguró el líder del PP nacional. La gestión del Año Santo le dio pie para situar al Ejecutivo gallego como ejemplo para otras administraciones. "Ahora en Galicia hay un Gobierno que es un modelo a seguir para el resto de España", proclamó ante un millar de asistentes, entre los que se encontraban sobre todo cargos políticos del partido y alcaldes.

El ambiente preelectoral empapó el encuentro en Soutomaior, tanto por la proximidad de los comicios municipales como por una posible convocatoria anticipada de las elecciones en España, adelanto en el que confían los populares para situar a Rajoy al frente de la Moncloa.

"Comienza una dura etapa de montaña en la que necesitaremos del esfuerzo y la generosidad de todos", expuso el presidente del PP pontevedrés, Rafael Louzán en alusión a las elecciones municipales del próximo año.

Dos fueron las indicaciones que dio Rajoy a los suyos de cara a esta cita electoral. "Hay que ser exigentes al elaborar las candidaturas para colocar a los mejores", aseguró Rajoy. El segundo consejo a su partido es que esté "cerca de la gente". "Os pido un mayor esfuerzo a todos para ganar las cuatro diputaciones y tener mayoría en más municipios", instó.

Los populares se quejan de que los pactos entre otras fuerzas les impiden gobernar en muchos municipios aunque el PP sea el partido con más apoyos. Por esta razón, Rajoy anunció que "esta semana" dará instrucciones para llevar a las Cortes una reforma de la ley electoral para que gobierne la lista más votada.

Pero el horizonte de las elecciones locales no sirvió a Rajoy para apartar el foco de Rodríguez Zapatero. "La mejor medida de política económica es cambiar al Gobierno", apuntó. En concreto, aludió a la ausencia del presidente del Gobierno del acto que celebran los sindicatos mineros en Rodiezmo (León). "Es la plasmación gráfica del engaño de Zapatero", censuró.

También Feijóo dedicó parte de su discurso a hablar de política nacional y encontró paralelismos entre el PSOE de Madrid y el de Galicia ya que ambos afrontan unas primarias. Así aludió a las ciudades de Vigo y Pontevedra, donde, según dijo, "a la mayoría de militantes no les gustan sus alcaldes". "A mí tampoco", apuntó. En todo caso, advirtió que las primarias en el PSdeG tienen "poco interés". "Salga quien salga, perderán las elecciones o mandará el BNG", concluyó. Los socialistas, por su parte, instaron ayer al PP a aclarar si incluirá tránsfugas en las listas.

El líder del PPdeG critica al BNG por querer "llenar las aulas de ideología"

El inicio del curso político del PP se produce en vísperas de comenzar el curso escolar y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, aprovechó la coyuntura para defender su proyecto lingüístico frente "a los que quieren llenar los colegios de ideología y de partidismo". "Se equivocan", aseguró en alusión al BNG.

Los nacionalistas hicieron esta semana un llamamiento a alumnos y profesores para que se rebelaran contra el decreto del plurilingüismo y hablaran gallego en las aulas. "¿Qué opinarían si un profesor en vez de impartir en gallego la materia que le corresponde, lo hace en castellano?", se preguntó Feijóo.

Por esta razón instó al Bloque a "hacer oposición y no imposición". En su opinión, la actitud de los nacionalistas es "irresponsable", pero también hizo cómplice al PSOE. "Lamento el comportamiento impositivo del BNG y el seguidismo de los socialistas", recriminó el líder del PPdeG.

"Estamos ante un Gobierno provisional", avisa el dirigente nacional

Si a Mariano Rajoy no le gusta como el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero gestiona la crisis, más preocupado se muestra todavía tras conocerse que Celestino Corbacho abandonará el Ministerio de Trabajo para concurrir como candidato en Cataluña y que la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, podría también dejar el Gobierno para ser candidata por Madrid."Estamos ante un gobierno provisional", sentenció.

Según denunció, "hay ministros que anuncian que se van ya y otros un poco más tarde". El líder del PP ironizó con que también los hay que trabajan "a tiempo parcial porque están en otras cosas".

Y además de "provisional" el Gobierno está "solo". No lo apoyan ni partidos, ni empresarios, ni sindicatos, según el líder del PP, que recriminó que busquen ahora el apoyo del PNV para aprobar los Presupuestos. "Las cuentas no pueden ser un instrumento para que Zapatero siga ahí, haciendo daño a la economía", criticó.