Las oposiciones en Galicia han estado en más de una ocasión en el punto de mira. La última, en unas pruebas de acceso al cuerpo administrativo de la Xunta (subgrupo C1) convocadas el pasado mes de septiembre y en las que tres hermanos figuran entre los cinco que obtuvieron mejores notas. Los tres fallaron y acertaron las mismas preguntas. La Fiscalía de Santiago ya ha intervenido presentando una denuncia ante el Juzgado de Instrucción Decano de la ciudad al considerar que hubo filtraciones del examen.

Según el Ministerio Fiscal, los hechos podrían ser considerados constitutivos de un delito de prevaricación ya que unos particulares pudieron haber accedido a información privilegiada. En este caso, al texto de los dos exámenes y de las plantillas de respuesta con anterioridad a las pruebas.

Cerca de 5.000 personas pugnaron en esas oposiciones en las que se ofertaban 140 plazas de empleo público y que se celebraron en Santiago el pasado mes de septiembre. Además de la coincidencia de apellidos en tres de los cinco opositores que consiguieron las mejores puntuaciones, también se da la circunstancia de que se inscribieron para la prueba en el plazo extraordinario que la Administración autonómica habilitó a raíz de la reforma de la ley que acabó con la obligación de hacer el examen tipo test en gallego. El plazo extra comentó el 15 de julio, de forma que los que se matricularon entonces tuvieron dos meses para preparar el examen.

La Fiscalía considera que los querellados pudieron haber logrado el texto de los exámenes y las plantillas de respuesta "empleando a medios o personas" que la instrucción judicial "debe determinar", aunque matizó "sin participación de quien integraba los mencionados tribunales".

Preguntado acerca de las medidas que pondrá en marcha Facenda para evitar nuevas filtraciones de exámenes, ayer mismo el director xeral de Función Pública, José María Barreiro, afirmó que "ya se están tomando" y los exámenes se fotocopian "en dependencias de la Administración y por personal funcionario". En cuanto al caso se tres hermanos que situaron entre los cinco primeros puestos en una oposición, el director xeral se limitó a manifestar que el asunto está "sujeto a una investigación judicial" y que "no es momento de hacer declaraciones que la perturben.