Entre enero y marzo, el primer trimestre del año, llegaron los primeros síntomas. Crisis o desaceleración económica, da igual el nombre que se le ponga, porque lo cierto es que las cuentas públicas están notando que hay sectores con dificultades y el consumo se resiente. Y uno de los principales reflejos es la recaudación fiscal. Echó el freno en el arranque de este 2008, y en abril se confirman los malos datos en los ingresos para Hacienda. El cobro por impuestos en Galicia acumula ya un descenso del 7,2%, con 188 millones de euros menos en los cuatro primeros meses del año en comparación con el mismo periodo de 2007, según los últimos datos de la Agencia Tributaria.

El Impuesto sobre el Valor Añadido, el IVA, que pagamos en en el precio de cualquier cosa que nos podamos imaginar, es, por eso, un buen termómetro de cómo va la actividad comercial en la autonomía. Sólo en abril, se desplomó un 28,4%. Un suma y sigue en la tendencia a la baja que arrastraba desde principios de año, hasta sumar en todo el primer cuatrimestre un descenso de casi el 11%. Por este concepto, Hacienda recaudó en Galicia entre enero y abril del pasado ejercicio más de 1.197 millones de euros, 130 millones de euros por encima de lo que lleva éste. El recorte es especialmente destacado en Lugo y Ourense, con alrededor del 20% menos en ingresos por IVA, y en la delegación de la Agencia Tributaria en Vigo, con una caída del 19%; mientras que en A Coruña se acerca más a la media gallega, con un -8,8%. Pontevedra se escapa de los números rojos: los ingresos aumentaron un 4,7% hasta abril.

En el caso concreto de las pequeñas y medianas empresas, el estancamiento de la recaudación del IVA es todavía mayor. En toda España, con un descenso acumulado del 15,7% en los cuatro meses, principalmente, "por la contracción" en los sectores inmobiliario y la construcción y una "agudización" del impacto del precio del petróleo. Las grandes firmas no se libran tampoco, con un descenso del 2,9%.

La desaceleración se nota también, y mucho, en el Impuesto de Sociedades, que pagan las empresas en función del volumen de su negocio. Desde la Agencia Tributaria señalan que aquí hay que tener en cuenta un matiz muy importante: el cambio de cálculo en la tasa permite a las compañías retrasar sus declaraciones hasta mayo, con lo que hasta el siguiente análisis no será concluyente la evolución de la recaudación. La evolución a la baja a causa de los mayores costes salariales, la subida de las materias primas y las dotaciones que las firmas están destinando a posibles insolvencias. A la espera pues del dato definitivo, los ingresos por el gravamen en abril se reducen un 77,6%, y hasta en casi un 60% en todo el cuatrimestre, con unos ingresos de poco más de 100 millones de euros, frente a los 249,6 de 2007.

Retenciones por trabajo

Con el batacazo del IVA, en lo que va de año, las aportaciones por el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas, el IRPF, están salvando la recaudación tributaria y ya se han convertido en la principal fuente de ingresos en Galicia para Hacienda, con 1.193,5 millones de euros, lo que supone un incremento del 8,5% con respecto al primer cuatrimestre del pasado ejercicio. Sube en todas las delegaciones de la Agencia Tributaria: por encima del 8% en A Coruña, Lugo y Ourense; un 5,5% en Pontevedra; y hasta un 10,2% en Vigo.