Por su parte, el consistorio tudense se justificó declarando que utilizó sólo el castellano "para facilitar la comprensión a los muchos visitantes portugueses" que recibe Tui a lo largo del año.

A Mesa respondió calificando este argumento de "surrealista" y afirmando que "evidencia el concepto de lengua y normalidad" de los gobernadores de la localidad.

También señaló que este Ayuntamiento "no fue hasta ahora una institución precisamente ejemplar" en cuanto al "uso y promoción" del gallego, pero advirtió de que la actual situación "no responde a la legalidad vigente, que marca la plena oficialidad de la lengua gallega en su propia tierra".

Finalmente, subrayó que la lengua constituye una "parte sustancial e insustituible del patrimonio", así como un "atractivo importantísimo", e insistió en que quienes visitan la localidad "saben que vienen a Galicia y quieren algo diferente", por lo que pidió que "no parezca" que pasean por Tui "como si no fuese un pueblo gallego".