El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
Así fue el encuentro del rey emérito con su nieto Pablo Urdangarin en Pontevedra
Gustavo Santos
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.
El rey emérito Juan Carlos I dejó por unas horas de lado su pasión por la vela para disfrutar de otro deporte, el balonmano. Acompañado por Pedro Campos y por su familiar Pedro de Borbón y Dos Sicilias, el monarca se desplazó hasta Pontevedra para ver el partido entre el Cisne y el Barça B, equipo en el que juega su nieto Pablo Urdangarin.