El Gran Café Colón, la Casa del Pueblo, la casa de baños La Iniciadora, los mercados de O Progreso y A Laxe, los cines Odeón y Royalti... Una nueva publicación, editada por la Universidad de Santiago de Compostela (Alfredo Vigo, Jesús Sánchez y Julio Vázquez, con la coordinación de Juan David Díaz López) trae al presente aquellas joyas arquitectónicas que Vigo derribó en la segunda mitad del siglo XX. Arquitecturas añoradas: edificios destruidos en Galicia, 1936-2001 revive a través de fotografías, reconstrucciones, planos y mucha historia aquellos emblemáticos edificios que la ciudad perdió en sus calles pero que persisten en la memoria.
El mercado de O Progreso
RGJ
El mercado de O Progreso fue inaugurado el 1 de octubre de 1908 con algunos cambios sobre el proyecto original pues al caer enfermo el arquitecto Benito Gómez Román se hizo cargo de él y de la dirección de las obras Jenaro de la Fuente. Constaba de dos plantas, una destinada a la venta de carnes y pescados y la otra a legumbres, frutas y productos similares, además de un cinturón de árboles por tres de sus lados para dar cobijo a los vendedores ambulantes.
El mercado de O Progreso
O Progreso se mantuvo intacto durante más de cuarenta años, hasta que en 1951 se llevó a cabo una ampliación que modificaba el edificio eliminando el parque que lo rodeaba y se habilitó en su interior el primer supermercado de Vigo, inaugurado en 1959. Diez años después, el Concello aprobó un anteproyecto, el conjunto actual, formado por aparcamiento, locales comerciales, mercado, viviendas y plaza pública cuyas obras se adjudicaron en 1974.
Estado actual del mercado de O Progreso
En 2016 se convirtió en gastromercado, tras unas reformas que lo dotaron del aspecto actual.
La conservera Antonio Alonso
Fue fundada en 1873 en Vigo por Antonio Alonso Santodomingo. En 1918, sus descendientes crean la sociedad Antonio Alonso-Hijos. A su nave primigenia, en O Areal, sumaron las de Bueu (1922), Celeiro (Lugo) y Setúbal (Portugal) entre 1924 y 1925. Vendían, sobre todo a Francia y Bélgica, donde su primera marca "Palais d´Orient", que es la marca por la que se conoce en la actualidad. El diseño fue obra de Jenaro de la Fuente.
Solar que ocupaba la conservera Antonio Alonso
La que es la conservera más antigua de Galicia y de España tuvo su sede primigenia en el cruce entre la calle Areal y Serafín Avendaño. Actualmente tienen sede en Bueu con la quinta generación de los Alonso al frente.
La casa de baños La Iniciadora
Abrió sus puertas al público el 10 de julio de 1876, levantada en la playa de las Baterías, sobre el mar, en terrenos que hoy ocupa el puerto. Construida totalmente en madera, contaba con 75 habitaciones, doce con bañeras de mármol, un gran salón de descanso con piano, gabinete de lectura y restaurante. La temporada de baños se iniciaba en mayo y acababa en noviembre.
La Casa de Baños La Iniciadora
Cándido Soto, un empresario promotor de varias iniciativas turísticas, encargó a Jenaro de la Fuente el proyecto. En 1903 se cerró una etapa. El balneario, que había sufrido varias reformas y al que incluso se le había añadido una planta más, fue derribado. Estaba afectado por la construcción del muelle que uniría A Laxe con La Ribera. Soto logró del Ayuntamiento de Vigo una nueva ubicación. Se trasladó a la playa de San Francisco, el lugar que se había descartado al inicio del proyecto.
La Casa de Baños La Iniciadora
Jenaro de la Fuente se encargó de nuevo de la elaboración de los planos del nuevo edificio, ubicado en la actual Cánovas del Castillo. La nueva construcción constaba de dos plantas, ya no estaba sobre el agua y además cambiaba la madera por el ladrillo. Tenía casi cien habitaciones y un segundo acceso desde Teófilo Llorente.
Aspecto actual del solar que ocupaba La Iniciadora.
El balneario se mantuvo operativo hasta los últimos años de la década de 1960.
La Casa del Pueblo
Diseñada por Manuel Gómez Román, la primera piedra se colocó el uno de mayo de 1911 y las primeras sociedades obreras se asentaron en el nuevo edificio sobre la calle García Barbón en agosto de 1913. El arquitecto adaptó un palacete burgués, de base ecléctica pero con ornamentación modernista, a sus cuatro plantas más sótano. Antes de la Guerra Civil contaba con casi 6.000 asociados repartidos en distintas sociedades agrupadas en la Unión General de Trabajadores.
Sede de UGT, donde se ubicaba la Casa del Pueblo
En 1937 se asentó en él la Sección Femenina. El inmueble sufrió años de abandono y deterioro, por lo que en 1947 se derribó. En su lugar se levantó el actual edificio, inaugurado en 1953 como la nueva Casa Sindical. Tras la dictadura se devolvió a UGT, que a día de hoy lo mantiene como sede en Vigo.
Cine Royalty
Fue la primera sala que ofrecía una programación diaria de películas mudas. El nuevo cine vigués se inauguró en 1916 con diseño de Pacewicz. Contaba con cuatro puertas de acceso y podía albergar a más de 600 personas. Disponía de dos salas de espera, en función del precio de la localidad que se había comprado. Se programaba una sesión todos los días y dos los fines de semana. Tras la Guerra Civil pasó a llamarse "Cinema Vigo".
Edificio que se levanta en el solar del Cine Royalty
El Cine Royalty sobrevivió hasta 1963 en la esquina de Velázquez Moreno con Marqués de Valladares.
Cinema Radio
Abrió sus puertas en 1943 cuando Eugenio González de Haz -propietario de Radio Vigo- compró el Cine Capitol, situado en la esquina de Magallanes y María Berdiales. La reforma recayó en el arquitecto Francisco Castro Represas, que introdujo el racionalismo en la ciudad con muestras como el Real Club Náutico.
Edificio en el solar que ocupaba el Cinema Radio
La pérdida progresiva de espectadores y la presión de la especulación urbanística llevaron al cierre del Cinema Radio en 1978. Se demolió y en su lugar se levantó en los años 80 un edificio de viviendas.
El Gran Café Colón
Se inauguró en 1886 en el cruce de García Barbón con Velázquez Moreno, pero aún viviría otro traslado hasta asentarse en 1906 en esta última calle, en un edificio de tres plantas diseñado por Benito Gómez Román.
El Gran Café Colón
Destacaba por la gran cantidad de luz natural en su interior, que le llegaba a través de un gran bóveda central. Contaba con mesas de mármol, billares, cafetería y también un palco en el que todos los días había actuaciones musicales. Fue algo más que un símbolo durante su existencia, un punto de 'ocio ciudadano', pero también un lugar imprescindible en el mundo de la cultura. Fue el que programó los primeros conciertos de jazz en Vigo.
Edificio que ocupa el solar del Gran Café Colón
A lo largo de los años mantuvo su incesante actividad. Hasta que llegó a su final en 1960. El edificio fue derribado para construir en el mismo solar otro que acogería a los Almacenes el Pilar y donde actualmente se asienta una conocida cadena de librerías.
La Metalúrgica
Los problemas de abastecimiento de las latas de conservas a principios del siglo XX llevó a Antonio Alonso Santodomingo, fundador de la conservera, a crear la primera empresa de litografía sobre hojalata que funcionó en Galicia: "La Metalúrgica". Creada den 1900, la nueva fábrica realizaba envases por estampación de colores.
Aspecto actual de La Metalúrgica
Hoy en día tan solo queda la fachada como vestigio de la fábrica diseñada por el ingeniero industrial José Barreras Massó. A él se debe el tramo central de la edificación, que debió ampliarse en los primeros años del siglo XX. En 1917 dio un “estirón” de la mano de Jenaro de la Fuente Domínguez y dos décadas después, en 1938, volvió a crecer con otro de los grandes arquitectos del Vigo del XX: Francisco Castro. En los años 70 cayó en el abandono y sus instalaciones pasaron a usarse como parque móvil de los bomberos e incluso la Policía Nacional. En 2020, parte del solar que ocupa y de su fachada de rehabilitaron como nueva sede de la Tesorería de la Seguridad Social en Vigo.
Edificio Rubira
El majestuoso Edificio Rubira (1880-1967), obra de Jenaro de la Fuente, fue considerado un monumento a la cantería de granito. En la confluencia de las calles García Barbón y Colón, el nombre se lo debe a la farmacia instalada en sus bajos. Fue uno de los más suntuosos de la ciudad y su pérdida fue de la más lloradas.
El edificio que sustituyó al Rubira
La demolición del Rubira es uno de los más claros ejemplos de las peores prácticas urbanísticas que, en su tiempo, se llevaron por delante parte del patrimonio arquitectónico, como recoge Jaime Garrido en su libro "Vigo. La ciudad que se perdió". "Con sus esculpidas piedras", el Rubira formaba parte de una manzana "armónicamente conjuntada" en el centro de la ciudad: las "Cuatro Esquinas". En su lugar, la banca levantó un gran edificio funcional que hoy acoge la sede del BBVA. Durante años, sus piedras permanecieron almacenadas en Chan de Amoedo, en un solar propiedad del empresario José Regojo, que pretendía reconstruirlo en Redondela. Sin embargo, los años pasaban y la falta de seguridad dejó toda la cantería presa del expolio.
Hotel Continental y Mercado de A Laxe
Imagen conjunta del antiguo Hotel Continental junto al Mercado de A Laxe. Construido en 1870 fue, por largo tiempo, el mejor hotel de Vigo. Otro magnífico diseño de Jenaro de la Fuente, estuvo en servicio más de sesenta años. Por su parte, el Mercado de A Laxe fue proyectado por Gómez Román en 1900 y se levantó en piedra, hierro y cristal. Conocido popularmente como "La plaza de Abajo", gozaba de justa fama por la calidad de los pescados que allí se ponían a la venta.
Edificio que sustituyó al Continental y el Hotel Bahía, en el solar del Mercado de A Laxe
Ambos edificios fueron derribados a finales de la década de los 60 para levantar un edificio de viviendas y el Hotel Bahía. El 5 de mayo de 1968, con gran pompa y boato, se colocaba la primera piedra del coloso de 19 plantas. Dos edificios de un gran valor arquitectónico fueron destruidos para edificar, una vez más, en altura. En esta ocasión, el ladrillo tapaba la bella vista de la Colegiata y cerraba al mar las calles interiores.
Cine Odeón
La imagen del Cine Odeón aún arranca un pellizco en el corazón de los vigueses. Inaugurado en 1917, se encontraba en la calle Urzáiz, esquina con la Magallanes. Obra del arquitecto Michel Pacewicz, fue muy alabado por su seguridad y amplitud. Hubo una función especial previa a la inauguracióncon la proyección de varias películas. Todos los empleados vestían uniforme y se sirvió champagne, Jerez, medias noches y emparedados. En 1965 cerró sus puertas y cuatro años después fue demolido a raíz de una solicitud para construir un banco y viviendas. Se abrió entonces con el mismo nombre una sala anexa al Tamberlick, en Eduardo Iglesias.
Edificio que ocupa el solar del Cine Odeón
Pese a que llegó a proyectarse la ampliación del cine, la demolición se consumó y en su lugar se levantó un gran edificio comercial que en la actualidad ocupa El Corte Inglés. Aquel proyecto lo firmaba Jenaro de la Fuente, que diseñó un elegante edificio con columnas clásicas y amplísimos ventanales. Una fenomenal fachada para la que sería la mayor sala cinematográfica de Galicia, con 2.000 butacas. Aquel sueño no pasó del papel.
Fábrica de Harinas La Molinera
La conocida como Fábrica de Harinas La Molinera estaba situada en García Barbón, entre la iglesia de Santiago de Vigo y la Metalúrgica. Su estampa llamaba la atención por el ladrillo rojo de su fachada y albergó desde una fábrica de harinas hasta colegio o un cuartel. Finalmente, fue demolida en los años 70.
Edificio que sustituye a la Fábrica de Harinas La Molinera
Tras su demolición, se levantó un edificio de viviendas de 12 plantas con un bingo en el bajo. Varios historiadores lo consideran un icono de la arquitectura viguesa. Se construyó en 1898 con inversión privada y en 1916 abandonó el uso industrial para albergar el colegio Sagrado Corazón de Jesús. Después llegaría otro centro escolar y más tarde se reconvertiría en cuartel, antes de caer a finales de los 70.
Castillo de San Sebastián
Cuando España estaba en guerra con Portugal por su independencia, bajo el reinado de Felipe IV, se levantan las murallas para proteger a los vigueses de los saqueos de sus vecinos. Del Castillo de San Sebastián, que con el del Castro, presidían aquella buscada fortificación, solo quedan los muros del lado norte con dos garitas. El resto fue derribado para construir la casa consistorial a principios de los años 70.
La casa consistorial se levantó sobre el Castillo de San Sebastián
Los Reyes de España inauguraron el nuevo edificio del Ayuntamiento de Vigo en 1976. Con un coste superior a los 300 millones de pesetas se levantó un torre de doce plantas más el sótano. Sería en los años 90 cuando finalmente se construiría la Praza do Rei, otro aldabonazo al patrimonio vigués que, en ese entorno, cuenta con otro de los tesoros a recuperar: La Panificadora. Esta última, ahora sí, tiene ya un proyecto firmado por Jorge Salgado y Celso López para su recuperación.
El mercado de O Progreso fue inaugurado el 1 de octubre de 1908 con algunos cambios sobre el proyecto original pues al caer enfermo el arquitecto Benito Gómez Román se hizo cargo de él y de la dirección de las obras Jenaro de la Fuente. Constaba de dos plantas, una destinada a la venta de carnes y pescados y la otra a legumbres, frutas y productos similares, además de un cinturón de árboles por tres de sus lados para dar cobijo a los vendedores ambulantes.