Apasionada del mundo animal desde sus primeros pasos, esta joven, natural de Cesantes, estudió un curso de Auxiliar de Veterinaria. Poco después, emprendió su aventura en el extranjero, concretamente en Londres, "decidí marcharme con una mano delante y otra detrás. Al final me apañé bastante bien", comenta Sara orgullosa. En esta ciudad inglesa logró forjarse un futuro, "encontré un trabajo que tenía mucho que ver con lo mío y me dediqué a cuidar animales que es mi pasión. A partir de ese momento las cosas comenzaron a coger forma y conseguí ser totalmente independiente", explica.

Actualmente reside en Galicia pero no se cierra puertas, "he vuelto en varias ocasiones a Londres para trabajar cuidando animales en temporadas concretas, como navidades o verano y pienso seguir haciéndolo siempre que pueda".

De la temporada que vivió como emigrante en Londres recuerda con nostalgia algunos momentos, "en alguna ocasión, me acercaba al río Támesis, cerraba los ojos y me imaginaba que la brisa y el sonido eran los de la Ría de Vigo. Es algo triste pero bonito a la vez".