La ejecutiva de Ciudadanos, y por unanimidad, vetó ayer los pactos con el PSOE después de las elecciones generales del 28 de abril. "Ni con el PSOE ni con Sánchez", precisó el "número dos" de los naranjas, José Manuel Villegas, dando quizá por bueno el motivo por el que el histórico socialista Alfonso Guerra dice que todavía no sabe si votará por Sánchez: "No sé si será candidato".

No obstante, la decisión solo afecta, al menos por ahora, a la cita con las urnas de abril, no a la del 26 de mayo, cuando se celebran municipales, autonómicas en 11 comunidades y dos ciudades autónomas y europeas.

Ciudadanos no se había posicionado hasta ahora tan rotundamente en contra de pactar con el PSOE en caso de que los números avalasen la entente, y su anuncio disparó las reacciones de sus rivales.

Por eso hubo quien recordó que, tras las elecciones de junio de 2016, los naranjas se negaron tajantemente a facilitar la investidura de Mariano Rajoy y después, en la segunda votación, facilitaron su reelección.

El PSOE, a quien iba dirigido el contundente mensaje, acogió casi desdeñosamente el veto de Albert Rivera. "Ellos sabrán si se sienten más cómodos con los socialdemócratas o con los ultraderechistas", dijo el ministro de Fomento y secretario de Organización, José Luis Ábalos.

Pero el portazo al PSOE no fue el único que ayer dio Ciudadanos. Además, Villegas despejó las dudas que pudiera haber sobre la posibilidad de ir conjuntamente con el Partido Popular al Senado, como sugería una información publicada por el diario "El Español". Una cosa es que Ciudadanos coincida con el PP sobre cómo actuar en Cataluña (sobre todo, en lo referente a una aplicación casi permanente del artículo 155 de la Constitución) y otra, bien distinta, la aspiración de los de Rivera de acudir a las urnas no solo para "superar el sanchismo", sino también para "superar la etapa del bipartidismo", caracterizada por "la corrupción, el repartirse los jueces entre Partido Popular y PSOE y el taparse las vergüenzas".

Según Villegas, que su partido llegara a algún entendimiento previo con el PP, "protagonista fundamental de esa etapa de corrupción y de parálisis", "sería confundir a los españoles".

Poco antes, el "número dos" del PP, Teodoro García Egea, había pedido "concentrar el apoyo" al PP en el Senado para poder "reeditar la mayoría absoluta" que obtuvieron en esta Cámara y aplicar así el 155 en Cataluña.

En cuanto a Vox, Villegas se limitó a afirmar que Ciudadanos intentará conseguir esa mayoría necesaria para que los populistas no tengan capacidad de decidir, pero si los votos no dan el 28 de abril para lograrlo, entonces serán ellos los que tengan que resolver si apoyan a Sánchez y a su "gobierno Frankenstein" o a la opción de los de Rivera.