La organización terrorista ETA anunció ayer por carta que ha dado por finalizado su ciclo histórico y su función y que ha desmantelado "completamente todas sus estructuras". En la carta en euskera, fechada el pasado 16 de abril y remitida por la organización terrorista a varias instituciones y agentes políticos, ETA hace pública su decisión de "dar por terminados" su "ciclo histórico" y su "función", dando "fin a su recorrido", adoptada después de un debate interno.

No obstante, fuentes de la lucha antiterrorista señalaron a "Efe" que no se trata del comunicado de disolución definitiva de la banda terrorista, que se espera hoy.

Tras conocer el contenido de la carta, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, dijo desde Marrakech (Marruecos) que los integrantes de la banda terrorista "deberán pagar por sus culpas" porque "no habrá ningún tipo de impunidad" para ellos.

"No volveremos jamás la cara ante estos terroristas y jamás nos pondremos de rodillas", ha apostillado Zoido. "Que sepan bien claro que tendrán que pagar por su culpa y que no hay ningún tipo de impunidad y que antes y después de este comunicado serán perseguidos allí donde se encuentren", advirtió.

ETA "miente una vez más y vuelve a pretender confundir a la sociedad" porque no es cierto que se ha disuelto, sino que "ha sido derrotada por las fuerzas de seguridad, el estado de derecho, la sociedad española y la judicatura", recalcó Zoido.

Subrayó que "lo que tienen que hacer" los integrantes de la banda es "poner fin a su situación pero colaborando y ayudando a que todos esos crímenes que quedan por esclarecer pudieran ser esclarecidos de forma total y absoluta".

"Lo único que tienen que hacer es colaborar y ayudar. Todo lo demás ya lo ha hecho con el Estado de Derecho y la sociedad española. Eso es lo que nos queda en cuanto a tranquilidad", apuntó Zoido, quien advirtió de que los miembros de ETA "serán perseguidos por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado allá donde se encuentren".

El contenido de esta carta se ha conocido dos días antes del acto que se celebrará el próximo viernes en Cambo (País Vasco francés) con motivo de la disolución de ETA, organizado por el Grupo Internacional de Contacto, el Foro Social Permanente y Bake Bidea.

El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, encabezará la delegación del partido en el acto de Cambo con "una simple vocación notarial", según decidió ayer la dirección del partido, que no entró a analizar públicamente la carta de ETA, sobre la que tampoco se pronunció el Gobierno Vasco.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, trasladó esta semana a los agentes internacionales que han trabajado para que se produzca el fin de ETA el agradecimiento del Gobierno vasco por su participación, su implicación y su preocupación en torno a la disolución de la banda terrorista, según desveló ayer el portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka.

El portavoz avanzó que el Gobierno vasco no descarta que tras la declaración que ETA "ha anunciado para mañana [por hoy]" pueda producirse una reacción compartida con el Gobierno de Navarra.

El medio digital "Naiz" publicaba ayer que hoy se hará pública la declaración de ETA sobre el final de la organización tras el debate mantenido por su militancia en los últimos meses.

Al frente de la delegación de EH Bildu en el acto de Cambo estará su coordinador general, Arnaldo Ortegi, mientras que Podemos Euskadi también estará representado en el acto por la parlamentaria vasca Eukene Arana y el secretario de Comunicación, Andeka Larrea.

UGT-Euskadi asistirá al acto con una delegación encabezada por su secretario general, Raúl Arza, para "certificar de una vez por todas que la organización terrorista ETA desaparece definitivamente tras décadas de terror, acoso, extorsión y asesinatos al conjunto de la sociedad vasca y española".

Por el contrario, Comisiones Obreras hizo pública ayer su decisión de no acudir al encuentro de Cambo "por falta de información" y por respeto a su "propia historia de confrontación contra el terrorismo de ETA", ya que no quiere "contribuir a blanquear" su final.

La organización terrorista advierte en su carta de que, si bien da por terminada su actividad, el conflicto político no ha terminado y responsabiliza a los Estados español y francés de haber alargado ese proceso y haber prolongado con ello el sufrimiento.

Según expone, "como consecuencia del cambio estratégico de toda la izquierda abertzale, ETA ha llevado a término el proceso iniciado en 2010, con la intención de abrir un nuevo ciclo político en Euskal Herria".

La organización terrorista destaca que su decisión "cierra el ciclo histórico de 60 años de ETA", si bien matiza que no supera "el conflicto que Euskal Herria mantiene con España y con Francia", ya que "el conflicto no comenzó con ETA y no termina con el final del recorrido de ETA".