Rianxeira

Jealsa ultima la reactivación de su planta de Boiro para llegar a 28.000 toneladas de atún al año

Prevé quintuplicar su producción propia tras el incendio que vivió en 2021, y así reducir “la dependencia de proveedores externos"

Fábrica de Jealsa en Boiro (A Coruña).

Fábrica de Jealsa en Boiro (A Coruña). / JEALSA

La gran fábrica que Jealsa posee en Bodión (Boiro), ligada a su marca Rianxeira, amanecía en mayo de 2021 envuelta en llamas. El paso de las horas constató un catastrófico incendio que forzó a la mayor empresa conservera de pescado nacional a resurgir de sus cenizas, planteando una reconstrucción que ha concluido con éxito para ahora recuperar completamente su actividad. “No tenemos fecha cerrada todavía”, señalaban ayer a FARO desde la compañía, que en estos momentos se encuentra tramitando “todos los permisos necesarios para su puesta en funcionamiento”. Entre ellos, la firma ha presentado ya un proyecto básico para la modificación sustancial de la autorización ambiental integrada de Rianxeira: “El objeto de la modificación solicitada es la ampliación de las líneas de procesado de atún para la obtención de lomos, incorporando una nueva línea de pelado tradicional y una línea de pelado procedente de un proyecto de I+D+i”.

Dicho cambio, conforme recoge el documento remitido a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, no afectará a la producción global de estas instalaciones. El propósito es ampliar una subetapa del ciclo productivo, para así “reducir la dependencia de proveedores externos y ajustarse a las condiciones de mercado”. Una vez se ejecute, el centro operativo podrá quintuplicar su producción interna, pasando de las 5.500 toneladas anuales de lomos de atún a las 28.000 que, como máximo, abarcará a futuro. O lo que es lo mismo, 61.600 kilos al día.

Para ello, como es obvio, Rianxeira tratará internamente más pescado sin procesar, también denominado raw. Elevará su capacidad de las 13.760 toneladas a las 56.250, teniendo en cuenta que durante el procesamiento de estas cantidades se generan mermas del 60% correspondientes a la materia orgánica que se pierde en los procesos de cocción, pelado o rechazos. Todos estos restos son enviados como subproducto para la producción de alimentación animal, comercializados por PetSelect o enviados directamente a clientes externos desde Rianxeira.

La mayor capacidad interna de procesado de lomos de atún conlleva asociado un incremento del consumo de agua, tal como indica el proyecto básico presentado. La conservera de Jealsa calcula que el volumen empleado crecerá en 2.000 metros cúbicos diarios, considerando una producción de 365 días al año a la máxima capacidad de la fábrica. Por este motivo, la compañía solicita “una ampliación del caudal de vertido” correspondiente a la capacidad máxima de tratamiento de la nueva EDARI (estación depuradora de aguas residuales industriales).

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“Los proveedores de lomos de atún de países que tienen acuerdos comerciales con la UE disminuyen sus producciones de lomos e incrementan sus producciones en conserva de atún para venderlas en el mercado de la UE”, expone la firma. Esta tendencia de mercado actual proyecta “una situación de potencial desabastecimiento de lomos pelados y cocidos”, y obliga a Rianxeira “a la planificación del tratamiento de estos lomos frescos en las instalaciones de Boiro”.

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