La profunda transformación que atraviesa la sociedad hace que el gobierno corporativo sea un concepto cada vez más habitual, no solo en las empresas cotizadas, sino en todas en general. Dicha transformación está alineada con la agenda de los ODS 2030 de la ONU, que pretenden cambiar nuestra sociedad y lograr la igualdad entre los géneros. Para ello es necesario que las mujeres, no solo accedan a la educación y al mundo laboral, en puestos de mandos intermedios, sino que puedan participar en los procesos de toma de decisiones políticas y económicas para alcanzar puestos directivos de liderazgo y posiciones en Consejos de Administración. Solamente, el 32% de los altos cargos, en sector público y privado y el 22% de los puestos en consejos de administración de la empresa españolas, están ocupados por mujeres (Schwab et al., 2020).
El estudio Consejeras en Galicia (Mariño y Martínez, 2020) realiza un mapeo de empresas gallegas aprovechando la vasta base de datos de Ardan, para una muestra de 69.586 empresas analizadas. Se realiza una segmentación en base a tres posiciones, Consejero, Consejero Delegado y Presidente. El análisis muestra que las empresas gallegas tienen 10.896 consejeros/as en sus órganos de dirección, de estos 8.137 (75%) son hombres frente a 2.759 mujeres (25%), cifra inferior al 30% exigido para las empresas cotizadas y lejano al 40% que deberán tener a finales de 2022. Las posiciones de Consejero Delegado y Presidente son mucho menores, 1.170 y 2.482, respectivamente. En términos porcentuales, la relación entre hombres (82%) frente a mujeres (18%) deja a las mujeres en una posición todavía menor al cargo de Consejeras
Hugo Barreiro| Pinche en en la imagen para ampliar
Los motivos de esta baja representatividad de mujeres han sido estudiados en la literatura con multitud de enfoques que contemplan desde las diferencias entre hombres y mujeres, los factores que condicionan la composición del consejo, la diversidad de género, el impacto en los resultados empresariales hasta las medidas legislativas implantadas para el avance en la igualdad de género. El estudio se centra en identificar las barreras por el lado de la oferta, que abarca temas de educación, habilidades, valores, actitudes, conflicto trabajo-familia, falta de acceso a redes de contacto y falta de identificación de roles de género, mientras que, por el lado de la demanda, las barreras hacen referencia a sesgos en los procesos de selección, en la aportación de las mujeres o en el limitado pool de mujeres para estos puestos.
Las conclusiones alcanzadas en el estudio, fruto de las reflexiones de los 46 participantes en los Focus Groups realizados están dirigidas en cinco frentes de acción, que intentarán disminuir las barreras de acceso de las mujeres a los puestos directivos y del Consejo. Entre estas están la necesidad de formación para directivas y consejeras, visibilizar los casos de éxito de consejeras gallegas, crear un lobby de mujeres consejeras gallegas, realizar mentoring a ejecutivas y adolescentes y por último, establecer KPIs para medir la presencia de mujeres en la empresa gallega.
*Investigadora en Consejeras de Galicia, CZFV