La Asociación Galega de Empresarios Depuradores de Moluscos (Agade) publicó ayer su informe sobre los números que dejó el mejillón en 2019, donde entre otras cosas se certifica un récord positivo y otro negativo: por un lado, se alcanzaron los 35 millones de euros de ventas al exterior (un 1,6% más) al exportar más de 47.700 toneladas; por otro, se registró el porcentaje más bajo en cuanto a tamaño del producto de la serie histórica, ya que con sólo un 8,69% de lo producido tenía calibre grande.
Agade explica también que el precio del mejillón para industria "sufrió una fuerte caída", mientras que en el caso del fresco "se mantiene la estabilidad" (se pagó 6 céntimos por kilo mejor). De hecho, dos de cada tres euros que ingresan los bateeiros es de ventas al canal de fresco.
Desde la asociación también destacan que "por primera vez" más del 50% del mejillón para transformación se hace con el sello de la DOP. "En fresco en cambio no llega ni al 5%", resaltan.