El Gobierno dará más dinero a la industria para rebajar el precio de la luz, pero las factorías gallegas tendrán que competir con cientos de fábricas más, sobre todo de Cataluña, para arañar un descuento en la factura. El aumento de beneficiarios y una compensación a la industria de 90 millones de euros por financiar en su recibo de la luz las renovables y los extracostes de suministro a las islas son las principales novedades del Estatuto del Consumidor Electrointensivo (ECEI), que los ministerios de Industria y para Transición Ecológica presentaron ayer a las asociaciones empresariales y a los sindicatos y que hoy iniciará sus trámites administrativos para, previsiblemente, llegar a la mesa del Consejo de Ministros a principios de marzo.

Los 90 millones de compensaciones, que saldrán del presupuesto del Ministerio de Industria y no repercutirán directamente en el recibo que pagan el resto de consumidores, se sumarán a los 172 millones que ya recibía la industria por los costes indirectos de CO2. No obstante, ahora serán muchas más factorías las que tendrán la consideración de electrointensivas porque los requisitos para beneficiarse de las medidas del Estatuto son mucho menos exigentes que las que había en el primer borrador o para concurrir a las subasta del servicio de interrumpibilidad, el que hasta ahora era el principal instrumento para rebajar el precio de la luz a la gran industria.

Al servicio de interrumpibilidad optaban 119 factorías -entre ellas las gallegas de Alcoa, Ferroatlántica, Megasa, Celsa Atlantic o Showa Denko- que acaparaban hasta el 20% del consumo total (sobre todo por el peso que llegó a tener Alcoa) y hasta 2019 figuraban entre los principales beneficiarios con las condiciones de la subasta que favorecía a los consumidores más intensivos. En el primer borrador del Estatuto el número previsto de beneficiarios se elevó a 276 industrias y ahora de las ventajas del Estatuto se podrán beneficiar unas 600 factorías con 300.000 trabajadores.

Las medidas afectan a 31 fábricas en Galicia. Una cuarta parte de esas 600 fábricas están en Cataluña, 153; 94 en la Comunidad Valenciana, 44 en el País Vasco, 31 en Galicia, 19 en Asturias y 19 en Madrid, principalmente. Son muchas más factorías las que se repartirán los 262 millones de euros disponibles, que no llegan, ni de lejos, a los más de 500 millones que hasta 2017 se daban con la interrumpibilidad.

El Ministerio de Industria, que ha liderado la confección del ECEI, ha previsto tres mecanismos de apoyo para los grandes consumidores de energía para abaratar su factura eléctrica. Por un lado, se les devolverá 172 millones de euros como compensación por los costes indirectos de CO2 incluidos en la factura, aunque no descartan que esta cantidad pueda ser superior. Además, les compensará con 90 millones para resarcirles de los cargos destinados a financiar las energías renovables, la cogeneración de alta eficiencia y el coste extra que suponen los territorios insulares, hasta un máximo del 85% de lo que paguen en su factura por estos cargos que abonará el Ministerio de Industria.

En tercer lugar, el Ministerio creará un mecanismo de cobertura de los acuerdos de compraventa de energía renovable a largo plazo (PPA) que financiará la Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación (Cesce).