Tomás Villén, CEO de Porsche Ibérica, acudió el pasado jueves a la inauguración de las nuevas instalaciones de Centro Porsche Vigo, del Grupo Pérez Rumbao. Con "la relación entre el consumidor y el concesionario" como clave de futuro, repasa los desafíos más importantes que afectan a la marca.
-¿Qué suponen para Porsche estas nuevas instalaciones en Vigo?
-Vigo tiene para nosotros una relevancia importante. Es un extraordinario socio desde hace muchos años y nos sentimos perfectamente representados. Tenemos temas importantes para el futuro y en Vigo lo están desarrollando muy bien, como es el tema de los híbridos enchufables. El 30% de las ventas en Vigo corresponde a estos coches frente al 20% de la media nacional. Es punta de lanza y va por delante de lo que buscamos nosotros.
-¿Entonces Galicia es un mercado especial para la marca?
-La cultura de automoción que hay en Galicia es superior que en otras partes. Eso se percibe y si te encuentras con un cliente que sabe del automóvil y tiene una marca como Porsche eso se traslada a las ventas. En este sentido se asimila más a lo que es Portugal. La gente es más sensible a los ciclos de vida, a novedades del automóvil y a la innovación.
-Porsche está dando el paso al coche eléctrico, que verá la luz el próximo año. ¿Es el futuro?
Lo es. En el año 2025 la mitad de los coches que comercializaremos serán 100% eléctricos o híbridos enchufables. En el 2017 lanzamos un nuevo Panamera híbrido y ahora lideramos el mercado de berlinas deportivas de lujo, siendo un 70% híbridos y el 30% son gasolina. Nos lo dicen en 2016 y decimos que es imposible, a no ser que escuches al cliente. Ahora cerca de 200 personas han pagado una señal y han solicitado probar el Taycan, el nuevo coche eléctrico que lanzaremos en 2019. Estoy convencido de que más pronto que tarde venderemos más híbridos y eléctricos que con motor a combustión.
-¿Y se dan todos los condicionantes para ello? No es fácil encontrar puntos de carga, por ejemplo.
-Nosotros antes de final de año tendremos 125 cargadores instalados por toda España en puntos de conveniencia, sitios donde van nuestros clientes. Antes de que lancemos el Taycan tendremos más de 20 supercargadores, de 350 kw. Centro Porche Vigo ha sido de los primeros que asumió tener uno. De alguna manera nos estamos preparando con mucha anticipación y lo hacemos con mucha ilusión, lo que no hace que la perdamos por los que tenemos ahora. Tienen que convivir.
-Muchos conductores piensan que se pierde la "esencia" de la conducción sin un motor a combustión.
-La marca necesita evolucionar. El cliente demanda esto, pero también hay los que piden esa "esencia". Nos preocupan mucho las prestaciones, la eficiencia del motor, cómo frenan, el chasis? Pero lo que más nos importan son las sensaciones. Yo probé un Taycan y sabía que las prestaciones iban a ser excelentes, pero puedo asegurar que no he tenido nunca una experiencia tan extraordinaria como con el Taycan. Lo que les diría es que prueben el coche, porque no defraudaremos.
-¿Está dando Porsche pasos hacia la implantación de la conducción autónoma?
-Porsche no se cierra a nada. Nos resistimos a quitar el volante, pero estamos trabajando en tener coches con toda la autonomía que te puedas imaginar, que en un momento determinado puedas hacer lo que quieras. No hay barreras. Desarrollaremos un montón de aplicaciones para poder disfrutar los coches, como la de Mark Webber, que si voy a un circuito haga sólo el trazado que haría el piloto para ver cómo se hace. Es una manera de entender la autonomía de forma diferente.
-¿Cómo afectó a la marca el cambio de la normativa WLTP?
-Como a todos los fabricantes, que somos parte de la solución, no del problema. Pocos sectores invierten lo que nosotros en eficiencia. Es nuestro caso además tenemos el reto de seguir siendo deportivos. Todos trabajamos para cumplir las normativas de emisiones por marca que exige la Unión Europea. Como primera medida ya tenemos un Tycan y un portfolio de productos diferentes que irán llegando.
-El pasado año fue de récord para la marca en la península, ¿qué previsión hay para 2018?
-Este año no vamos a hacer récord. Cerraremos con alrededor de 2.900 coches y el año pasado fueron unos 3.000. Lo que hay que subrayar es que lo vamos a hacer sin haber vendido diésel. Estar a 100 coches del récord sin vender diésel es de por sí un récord. Podemos calificar el año de extraordinario.
