El Gobierno está estudiando el establecimiento de un registro horario y el reconocimiento expreso del derecho de los trabajadores a la distribución regular o previsible de su jornada de trabajo. Así lo avanzó ayer la ministra Magdalena Valerio durante su intervención en la Comisión de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social en el Senado, donde ha asegurado que esta actuación se integra dentro de los cinco ejes a realizar por parte de su Ministerio de cara a los próximos meses. Según la ministra, se debe equilibrar la flexibilidad en la distribución de la jornada de trabajo desde la perspectiva de la empresa con el derecho de los trabajadores a una jornada previsible que permita la conciliación familiar.

El Ejecutivo tiene también en agenda, aunque en fase muy inicial, la posibilidad de implantar un convenio especial para las personas de más edad con "importantes carencias" en la cotización provocadas por largos periodos de paro o por contratos muy precarios por horas durante la crisis.