El Gobierno francés prepara una enmienda legislativa dirigida a plataformas como Uber para ofrecer unas condiciones laborales mínimas a los trabajadores y reducir su precariedad, a cambio de garantizar flexibilidad a las empresas con un estatuto a medio camino entre el asalariado y el autónomo. Se trataría de formalizar la relación laboral con "una carta que podrá ser homologada por el Estado", explicó la ministra de Trabajo, Muriel Pénicaud, a Le Figaro.