La dirección de PSA Peugeot Citröen ha convocado a los sindicatos franceses con representación en la empresa para una reunión el próximo día 12 en París. Los sindicatos aseguraron ayer, como recogió el diario The Wall Street Journal y confirmó la agencia Reuters, que la multinacional elevará el número de despidos en 4.000 personas. Esta cifra se añadiría a las 6.000 bajas ya previstas en un plan de austeridad que, como explicó el patrón de PSA, Philippe Varin, ha resultado "insuficiente".

El líder sindical de Force Ouvriere, Jean-François Kondratiuk, desveló que la dirección de la empresa "presentará una serie de medidas adicionales no previstas inicialmente". Fuentes de la multinacional declinaron hacer cualquier valoración respecto de las declaraciones de Kondratiuk, y tampoco adelantaron el contenido de la reunión de la semana próxima. "Los despidos se elevarán hasta las 8.000 ó 10.000 personas en Francia", agregó el sindicalista Christian Lafaye a la agencia Bloomberg. Si se cumplen los temores sindicales, las 10.000 bajas supondrían un recorte de entorno al 10% de la plantilla total de PSA en Francia.

En la pasada reunión, celebrada el 28 de junio en París, la dirección de la empresa no hizo ningún anuncio sobre el futuro de la fábrica de Aulnay-sous-Bois. Las centrales sindicales, como ya recogió FARO, dan por hecho que en ese proceso de reestructuración se procederá al cierre de esta factoría, situada a las afueras de París,y que emplea a algo más de 3.000 trabajadores.

Esta posible clausura es la que eleva sustancialmente el cálculo inicial de bajas de la dirección de PSA. Este centro, que ensambla el Citroën C3, es uno de los menos rentables del grupo. Otras fuentes sindicales creen que solo están en riesgo unos 1.000 empleos de esta fábrica.

Las ventas del grupo en el mercado europeo cayeron un 15% en los cinco primeros meses del año.

Vigo se salva

Los malos augurios que proceden de Francia contrastan con las buenas expectativas de la factoría viguesa de Citroën. Como desveló este diario, los sedanes M3 y M4,bautizados ya como Peugeot 301 y Citroën C-Élysée, permitirán a la planta viguesa de PSA Peugeot Citroën crear 200 nuevos puestos de trabajo el próximo otoño.

Se trata de la primera vez desde 2009, año en el que se suprimió parte del turno de noche, que el centro de Balaídos logra generar empleo neto por necesidades de producción y podría suponer un punto de inflexión para la industria viguesa de la automoción desde el estallido de esta crisis. Los sindicatos confían en que esta nueva carga de trabajo reactive el empleo en todo el sector.

El Peugeot 301 y el Citroën CÉlysée son parte central de la estrategia del grupo por reducir su dependencia de Europa y "conquistar" los mercados de rápido crecimiento.