Los astilleros vigueses cierran el jueves en protesta para exigir un nuevo "tax lease"

Los sindicatos del sector naval han decidido pasar a la acción ante la falta una respuesta al problema de tax lease por parte de Bruselas. Los ánimos entre los trabajadores se están caldeando cada semana que pasa sin que se vislumbre una solución, una vez que ya han pasado más de 10 meses desde que la Comisión de la Competencia, que preside el español Joaquín Almunia, suspendió el sistema de bonificación fiscal al que acudían los astilleros y los navieros para la construcción de buques.

La situación es tan grave que los tres sindicatos mayoritarios en la comarca de Vigo –CC OO, UGT y CIG– han decidido de nuevo unir de nuevo sus fuerzas para presionar en la calle a la Xunta de Galicia y al Gobierno central para que den una "contundente" respuesta ante Bruselas para evitar que el sector desaparezca.

La primera acción será la paralización de los astilleros durante media jornada el próximo jueves. A las 10 de la mañana está previsto que los trabajadores de los astilleros que quedan en activo suspendan su trabajo. Media hora después saldrán de sus centros de trabajo con destino al cruce de la calle Colón con Policarpo Sanz sobre las 11,30 y media hora más tarde celebrarán una asamblea ante el edificio de la Xunta en Vigo.

Los responsables comarcales de los tres sindicatos, José Cameselle (CC OO), José Antonio Juste (UGT) y Serafín Otero (CIG), acompañados de los respectivos responsables del naval, acusaron a la Xunta y al Gobierno central de "falta de compromiso con el sector" y de "carecer de peso ante Bruselas".

En este sentido, el portavoz del naval de UGT, Diego Atanes, se quejó de la desinformación" que desde la Consellería de Industria sobre la reunión celebrada en Madrid entre el comisario de la Competencia, Joaquín Almunia, y el ministro español de Industria, José Manuel Soria. Según Atanes, la falta de noticias sobre el encuentro augura "malas noticias", mientras que José Antonio Juste sospecha "que se haya pactado el entierro del sector".

Los sindicalistas advirtieron que tanto la Xunta como el Gobierno central deben de dejar de echar la culpa de la situación a Almunia e intentar buscar una solución cuanto antes "para que Vigo no muera".

Recordaron que no es el tax lease el único problema del sector y culparon de la situación "a la falta de compromiso político" con el sector.

Manifestación

Además del paro del jueves, los sindicatos han convocado una manifestación el próximo sábado a las 19 horas que partirá del cruce de la calle Urzáiz con Gran Vía y Lepanto bajo el lema "Polo futuro industrial de Vigo. Defendamos o naval" y que terminará en la delegación de la Xunta en Vigo.

El responsable del naval de CC OO, Ramon Sarmiento, precisó que la manifestación "tendrá exclusivamente carácter sindical" y añadió, que a diferencia de la celebrada en julio del pasado año "alguno que en aquel momento no dudó en coger una funda no está legitimado para acompañarnos".

Desde la CIG, se recordó que la industria naval representa el 30% de la riqueza de la comarca y que a causa de la paralización del tax lease "ya han desaparecido más de 8.000 empleos y unas 200 empresas tuvieron que cerrar. "Hay culpables políticos de esta situación y tenemos que señalarlos; los gobiernos español y gallego tiene que buscar alternativas al sistema de bonificación fiscal y hacer una apuesta clara por el sector, ya que de los contrario certificaría su muerte", señaló el secretario comarcal del sindicato nacionalista, Serafín Otero.

Los administradores concursales de Juliana piden la inhabilitación de los directivos de Vulcano

Los administradores concursales de Factorías Juliana solicitaron en el juicio que se celebró ayer en Oviedo la inhabilitación de los directivos de Vulcano a los que hace responsables de la quiebra del astillero gijonés.

En la vista sobre la calificación del concurso de acreedores de Factorías Juliana, los administradores del astillero piden a los directivos de la empresa viguesa que abonen 59,28 millones de euros como responsables de la quiebra.

La defensa de los directivos vigueses mantuvo que la quiebra fue fortuita, mientras que los representantes de los sindicatos UGT y CC OO, que fueron testigos de la administración concursal, señalan que la quiebra del astillero se debió "a la mala gestión y previsión".

Los administradores concursales llegaron a acusar a los responsables de Vulcano de llevar al astillero gijonés "una cartera de buques sísmicos a sabiendas de que Juliana no tenía capacidad para cumplir los costes ni los plazos para ese tipo de construcciones", provocando así la quiebra y "eliminar a un competidor".

Según fuentes de Vulcano, en el juicio quedó patente que la voluntad de la empresa viguesa era dotar de trabajo a sus nuevas instalaciones.

De hecho, el director del astillero antes de la compra, cuando todavía era propiedad de Izar, había previsto que Juliana finalizase unos quimiqueros que se estaban construyendo en un astillero de la empresa estatal en Puerto Real, pero que al final se decidió que era más rápido y operativo la construcción de los sísmicos encargados a Vulcano por la armadora PGS.

Sin embargo, según fuentes de Vulcano, los sindicatos de Juliana rompieron el compromiso de colaboración para terminar esos barcos.

"Los trabajadores de Juliana tenían unas garantías de la Sepi de poder jubilarse con 50 años y cobrar el 100% de su salario en el caso de que el astillero no fuese bien. Y eso fue lo que hicieron, ejecutar las garantías que le ofrecía la empresa estatal de construcción naval", señalan las fuentes de Vulcano.

Estas fuentes añadieron que los directivos del astillero vigués "están completamente tranquilos" porque se ha demostrado "que la responsabilidad de la quiebra vino por la actitud de los trabajadores de Juliana y no por una mala gestión".

"Las ayudas de la UE son para el naval, no para inversores"

El secretario comarcal de UGT en la comarca viguesa, Antonio Juste, reveló ayer que el primer documento sobre el tax lease remitido a por España a las autoridades comunitarias fue rechazado "porque estaba montado para los especuladores".

Juste indicó que las propuestas que presenta el Gobierno español se quiere seguir montando para los especuladores. "El modelo francés está dirigido para los armadores y no para los inversores que nada tienen que ver con el sector de la construcción naval".

El sindicalista añadió que además del modelo francés existen otras vías como son los incentivos fiscales que utilizan Holanda y Alemania, sobre este último país, indicó que Rajoy no solo debe cogerlo como ejemplo cuando interesa, y añadió que si las propuestas basadas en el modelo francés no son aceptadas por la UE "deben ponerse encima de la mesa los otros mecanismos que utilizan varios países europeos".

Sobre la propuesta por parte de la Xunta de denunciar otros sistemas de bonificación fiscal de otros países, los sindicalistas han considerado que se trata de una "cortina de humo" que "significa que no tienen capacidad de resolver el problema por ellos mismos y acuden a una cuestión jurídica que no lleva a ninguna solución".

Por otra parte, sobre la creación de un fondo social, han rechazado esta posibilidad por suponer un "cementerio de parados" y han estimado que "si apuntan eso es porque existe el convencimiento de que no hay solución".