El "tax lease", un instrumento financiero que permite la amortización acelerada, en tres años y medio, de los buques que se construyen en España. Se instrumenta de la siguiente forma: La construcción del buque la encarga formalmente una entidad de leasing (arrendamiento financiero), que cede el buque a un grupo de inversores, que a su vez alquilan el barco al armador con una opción de compra irrevocable al finalizar el contrato.

La clave está en el grupo de inversores, que se busca entre empresas españolas con altas bases imponibles positivas en el impuesto de sociedades, unas bases imponibles que la legislación española les autoriza compensar con la amortización acelerada del barco. Esto es, les permite ahorrar impuestos. El beneficio también se traslada parcialmente al armador mediante las cuotas de arrendamiento del barco o del precio de la ejecución de compra.

La Comisión Europea ya comenzó a investigar este sistema en 2009, cuando la ministra de industria de Noruega, Sylvia Brustad, envió una carta a la entonces comisaria de competencia de la UE, Neelie Kroes.