Alrededor de un millar de pescadores, mariscadores y bateeiros de la ría de Muros y Noia se concentraron ayer ante el edificio administrativo de la Xunta en Santiago para protestar por el traslado a Muros de las dos jaulas experimentales de cultivo de salmón instaladas en Arousa. Los profesionales del sector insisten en que los efectos de los viveros pueden ser "nefastos" en el medio marino y en las actividades dependientes y alertan de que se pueden perder más de 5.000 empleos en la zona.

En medio de la protesta, la conselleira do Mar, Rosa Quintana, salió a hablar con los manifestantes y convocó a los representantes del sector a una reunión en las instalaciones de su departamento. La responsable del departamento de asuntos pesqueros del Ejecutivo gallego comunicó a los afectados que la decisión del traslado de las jaulas "está tomada" y que no hay vuelta atrás.

Ante el inmovilismo de la Xunta, pescadores, mariscadores y bateeiros de la ría de Muros y Noia anunciaron que continuarán con las protestas si la conselleira no rectifica en los próximos días. El sector tiene previsto entregar la próxima semana a la Consellería do Mar nuevos informes que, asegura, demuestran los efectos contaminantes de estos artefactos en la ría. Por ello, los afectados "darán un margen" al departamento que dirige Quintana para que los analice y revoque su decisión.

"La conselleira tendrá que pronunciarse", avisó el patrón mayor de Noia, Santiago Cruz, tras la improvisada reunión con la responsable de Mar y en la que también participaron los patrones mayores de Muros y Porto do Son, un representante de los armadores de artes menores y dos mariscadores.

Quintana, sin embargo, insistió en que los informes que maneja la Xunta "avalan la viabilidad del cultivo" del salmón y aseguró que esta actividad no supondrá la contaminación de la ría ni una rebaja en la clasificación de los bancos pesqueros, una de las mayores preocupaciones del sector.

Además destacó que la actividad generará más de 300 empleos.

Mientras, la empresa North West Food –la firma autorizada al cultivo de salmón en Muros– aseguró ayer que mantiene "intacta" su intención de instalar las dos jaulas en el polígono C de la ría muradana porque, advierte, es su "derecho".

La compañía también instó al sector pesquero y marisquero de la zona a "que vaya al juzgado" con sus quejas.