Reino Unido anunció que recortará el IVA del 17,5 al 15%, una medida con la que pretenden, junto con otras, combatir la crisis económica que asola el mundo. Esta decisión le costará al país más de 23.500 millones de euros, que intentarán compensar con un aumento de los impuestos a las rentas más altas, y con un sorprendente incremento de los impuestos en las nóminas, salvo los de rentas más bajas. Minutos antes, el primer ministro, Gordon Brown, defendió estas medidas como las únicas posibles para hacer frente a la crisis, preparando el terreno para el ministro de Economía, Alistair Darling, que fue el encargado de presentar las medidas. Tras el anuncio de las medidas, la bolsa de Londres registró la mayor subida en 20 años.

"Estas medidas son extraordinarias, por los tiempos difíciles que atraviesa la economía mundial", relató Darling, que precisó que "está teniendo un gran impactó sobre las empresas y las familias de todo el mundo". Por todo ello, anunció una rebaja en el IVA de 2,5 puntos, hasta el 15%, que es el mínimo que establece la Unión Europea. Además, también anunció recortes en el gasto, todo con el motivo de evitar que la recesión del Reino Unido se agrave, y cortar la espiral depresiva. Así, ayudarán a las pequeñas empresas, a las rentas más bajas y a los hogares.

Sin embargo, también anunció que estas medidas no serán gratuitas, y que su gasto total, que podría superar los 23.500 millones de euros, se sufragará con subidas de impuestos en el futuro. En concreto, a partir de 2011, se producirá un aumento en los impuestos a las rentas más altas, las que superen los 187.000 euros anuales, y un sorprendente incremento sobre las aportaciones a la Seguridad Social de trabajadores y empleadores, salvo las más bajas. Además, se aumentarán en el alcohol, el tabaco y la gasolina. En total, las medidas tomadas supondrán el equivalente al 1% del PIB británico.

Por otro lado, en su comparecencia ante los Comunes, Darling anunció un descenso en las estimaciones del crecimiento para el año próximo. Así, sus proyecciones pasan de un aumento del 2,75%, a un descenso de entre el 0,75 y el 1,25, la revisión a la baja más grande de la historia del país. Por último, anunció que el endeudamiento será "perverso y perjudicial".