Altri garantiza “el caudal y la máxima calidad de las aguas” del Ulla y de la ría de Arousa

Asegura que sus técnicas permitirán incluso oxigenar el río en verano | “No usaremos cloro ni lejías, sino oxígeno. El proceso no es comparable al de las antiguas celulosas”, manifiesta

Planta de tratamiento de efluentes que el grupo Altri tiene en su factoría de Biotek. |   // CEDIDA

Planta de tratamiento de efluentes que el grupo Altri tiene en su factoría de Biotek. | // CEDIDA / Xan Salgueiro

Xan Salgueiro

Xan Salgueiro

El proyecto Gama “combinará tecnologías para el uso y devolución del agua que no utiliza ninguna otra industria del sector en España”, afirma Greenfiber, que sostiene que está diseñado para “generar impacto positivo” en Palas de Rei. Permitirá, por un lado, “mantener el caudal hídrico del Ulla y, por otro, la calidad tanto de las aguas del río como de la ría de Arousa y, por lo tanto, del marisqueo”. Esto será posible por la innovación e inversiones que el grupo Altri ha llevado a cabo en sus plantas de Portugal en los últimos años y que la sitúan como “referente del sector en uso de agua a nivel mundial”.

Pedro Baptista, director de Operaciones de Altri en España, asegura que “Gama aúna la tecnología más innovadora en el tratamiento de aguas que hay actualmente en el mundo. Llevamos años invirtiendo en I+D en Portugal y Gama será el mejor ejemplo europeo de esta nueva industria basada en la sostenibilidad, la innovación y la mejora continua”. La inversión para el tratamiento de aguas será de 80 millones de euros, “una cantidad inédita en ninguna otra planta del sector”. En este sentido, a modo de ejemplo, señala que la EDAR que se proyecta en Santiago de Compostela para tratar las aguas residuales de la ciudad y su comarca contempla un presupuesto de 58,9 millones.

Pedro Baptista explica que Altri “es la única empresa del sector que recircula efluentes, lo que le permite reducir a la mitad las cifras de uso de agua de otras: 15 m3/t de agua, frente a 30 m3/t de otras y que en Gama bajarán hasta los 8 m3/t”. Asegura que han “estudiado al detalle” el caudal del Ulla durante todo el año y en diferentes períodos, y que “los porcentajes de merma será inferiores al 1% durante nueve meses, entre el 1-2% en junio-julio y el 2% en agosto y septiembre”.

En segundo lugar, “el proceso técnico de la planta de Palas de Rei para fabricar fibras textiles y lyocell no es ni siquiera comparable al de las antiguas celulosas de pasta de papel. No usaremos ni cloro ni lejías, sino oxígeno, y todos los gases olorosos serán reutilizados dentro de la propia planta para producir energía, por lo que será un centro con olores cero, tal y como sucede en nuestras plantas de Portugal”, remarca.

Y, en tercer lugar, explica Baptista, “el agua se devolverá al Ulla depurada, con una calidad que no cambiará el estado actual del río y llegará a la ría de Arousa en las mismas condiciones y, por eso, no afectará, en ninguna medida, a la producción de los bancos marisqueros”. De hecho, apostilla, “en determinadas épocas del año en el que los niveles de oxígeno bajan de manera drástica en el Ulla, la tecnología de Greenfiber permitirá mejorarlos al devolver el agua más oxigenada”.

Con respecto a las emisiones de los gases generados en el proceso productivo, Baptista explica que “serán tratados antes de ser liberados a la atmósfera”. Ese tratamiento previo garantiza que, “en todos estos parámetros, las concentraciones están por debajo de las exigidas en las mejores técnicas disponibles de la comunidad europea”. La altura de 75 metros para la chimenea fue precisamente definida en base a un estudio de dispersión “basado en complejos modelos matemáticos que garantizan la no afectación a la salud humana o de los animales”. Además, finaliza, “se emplearán las más avanzadas tecnologías que permitirán captar todos los gases olorosos para ser reutilizados en la producción de energía, de modo que se garantice una ausencia total de malos olores en el entorno”.