Levantarán todo el adoquín del puente de Pontevea para destapar la calzada original

El proyecto de puesta en valor del puente medieval de Pontevea y su entorno tendrá mayor calado del inicialmente previsto. Las catas y labores arqueológicas en este Bien de Interés Cultural (BIC) han dejado al descubierto una parte importante de la calzada original en el acceso a la infraestructura desde el Concello de Teo, mientras que en la parte de A Estrada se estima que las modificaciones fueron mayores, dado que las catas no evidenciaron esta estructura bajo la superficie actual. El alcalde estradense, José López Campos, aprovechó ayer su desplazamiento hasta Santiago para interesarse sobre el terreno por las actuaciones. El mandatario estuvo departiendo con el ingeniero Manuel Durán Fuentes –uno de los mayores expertos del país en puentes antiguos–, arqueólogo y otros técnicos que supervisan la actuación. Según indicó, se retirará todo el adoquinado actual del puente para dejar al descubierto la calzada original.

En base a las explicaciones ofrecidas ayer, las obras sirvieron para revelar dos niveles de calzadas superpuestos. El inferior sería del siglo XVI, de la época en la que se construyó este puente sobre el río Ulla para comunicar las provincias A Coruña y Pontevedra a través de la conexión de los municipios de Teo y A Estrada. La infraestructura formalizó este paso como la principal vía de comunicación de A Estrada con Santiago.

Sobre esta calzada se construiría otra, la que se ve en un nivel superior, y que dataría del siglo XIX. Gracias a la excavación realizada, pudieron encontrarse no solo el vial primitivo y el que se ejecutó después, sino también varios clavos gruesos con que se fijaban los aros de hierro a las ruedas de los carros.

Ampliación del presupuesto

El alcalde trasladó que los 60.000 euros de inversión inicialmente previstos para la actuación en este BIC y su entorno se elevarán a alrededor de 300.000. Explicó que se trabajará sobre los dos accesos y también sobre el puente, buscando una recuperación integral de su estética. Añadió que también se extenderán los tiempos, subrayando que los propios especialistas indicaron que tenían más trabajo del previsto. “No hablamos de plazos, pero tienen trabajo por lo menos para tres meses”, calculó. El mandatario destacó la implicación del conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, con este proyecto, y subrayó que los trabajos realizados hasta la fecha constatan que se trata de una actuación “con muchísimo valor patrimonial”.

El regidor explicó que la visita realizada en la mañana de ayer le permitió conocer, de la mano de los técnicos, distintas curiosidades relacionadas con este puente. Es el caso de la historia de uno de los arcos en el lado estradense, que fue demolido durante la guerra contra los franceses y reconstruido con posterioridad. Indicó que fue en el siglo XIX cuando el ayuntamiento de A Estrada sumó esfuerzos económicos para la reconstrucción de esta estratégica infraestructura para la comunicación del municipio con Santiago, además del paso de quienes venían del Ribeiro buscando la capital del Apóstol.

Las catas realizadas en los últimos días permitieron buscar la base original del puente. “Está a unos 80 centímetros-un metro por debajo del adoquín”, trasladó el alcalde, de ahí la intención de aprovechar los trabajos para retirar el adoquinado –relativamente moderno– que actualmente cubre este puente para dejar al descubierto la calzada con la que se concibió en el siglo XVI.

El puente de Pontevea fue declarado en 2017 Bien de Interés Cultural por la Xunta de Galicia, sumándose a los contados monumentos de esta categoría que cuentan con esta distinción y protección en suelo estradense. En el entorno estradense de este puente ha trabajado intensamente en los últimos años la asociación Entre as Pontes, recuperando para la zona A Praíña como uno de los reclamos turísticos indiscutibles de la zona en los últimos veranos.

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