El médico rural gallego, “uno de los personajes históricos más importantes de nuestra tierra”, es el protagonista de la nueva sala de exposiciones de la Casa do Patrón. El museo etnográfico de Codeseda, en la parroquia lalinense de Doade, ha terminado el montaje de una nueva sala monotemática situada en su tercer edificio y cuyo objeto es divulgar la evolución histórica de la medicina tradicional y de las boticas a lo largo de los siglos. El espacio brinda “un viaje por las raíces y cimientos del modo de ser, de la cosmovisión y de la identidad del pueblo gallego”, resume su presidente, Manuel Blanco Villar.

Detalle de un panel. | // FDV

“Como soporte técnico de esta nueva exposición, procedemos a la redacción de un proyecto de musealización de esta colección, didáctico, original y novedoso, dentro del marco expositivo del gran ecomuseo del mundo rural gallego”, expone el presidente del centro etnográfico. La sala ha sido habilitada a modo de despacho profesional del médico rural gallego, con los principales aparatos utilizados en la medicina tradicional. Muestra una antigua botica, utensilios utilizados en la profesión de dentista, una biblioteca médica histórica y farmacopea popular. Los diferentes elementos expuestos se complementan con paneles informativos, fotografías e imágenes para abordar “del modo más didáctico posible” el mundo de la medicina rural.

La exposición, que es apta para todos los públicos, sin ningún tipo de barreras arquitectónicas ni sensoriales, trata los temas enumerados mediante objetos, instalaciones, recreaciones, imágenes, ilustraciones, fotografías y actividades didácticas programadas. La información recogida en los textos de los paneles “refuerza el mensaje de los bienes expuestos y de las representaciones gráficas –explica Blanco–, estando escrita con rigor, pero de forma sencilla y accesible para todos los públicos, huyendo de los excesos del lenguaje académico o científico, con la pretensión de que sea, además de didáctica, amena y entretenida”.

La nueva sala aspira a ser “referente por su didáctica, referente por sus recursos expositivos, referente por su originalidad y también por ser un proyecto de base emanado de la acción social de una colectividad, a favor de la valorización de nuestra cultura y de nuestro patrimonio”, valoran desde la Asociación Etnográfica de Codeseda. En este sentido, quiere hacer público su “profundo agradecimiento” por su colaboración a los doctores Jesús Aller, Luis González Taboada (Licho) y Benedicto Rivas Zalabeite, de Lalín; José Arturo Marques Lorenzo, de Santiago; y José Manuel Lage, de Maceda; así como a las farmacias Carballude Taboada, Crespo Soto, García Curros e Inés Madriñán (Lalín), Carmelo Parrado (Prado) y a la de Dozón; y a los dentistas Mauro Fernández Silvela y Roberto Villanueva, ambos de Lalín.