Ni dimite ni rectifica una coma de sus declaraciones sobre el presidente de la cooperativa O Rodo, José Luis Camiñas. El presidente de Xuncoga, Manuel Fernández, descarta entrar en un debate público en bucle con el dirigente agrario cambote y se limita a conminarlo a saldar los compromisos pendientes que su entidad tiene con la cooperativa de segundo grado de la que forma parte con seis más de la comarca dezana.
“Solo espero que pague, no voy a decir nada más”. Así resume Fernández la invitación de Camiñas a convocar una asamblea urgente para dar explicaciones sobre sus manifestaciones acusatorias contra O Rodo por adeudar cientos de miles de euros a Xuncoga y al tiempo presentar su dimisión. “No, no voy a dimitir y Camiñas si quiere que vaya al juzgado o a donde estime oportuno porque las cuentas son públicas y las tienen todos los presidentes”, zanja. Para Manuel Fernández esta guerra tiene nombres y apellidos y parte de una discrepancia de Camiñas con el dirigente de otra cooperativa por la contratación de una trabajadora que pertenecía a la cooperativa rodeirense, que acabó incorporándose a otra de Lalín. “Así es”, señala a preguntas de esta Redacción.
Pero el mandato de Fernández al frente de la cooperativa que aglutina siete dezanas tiene fecha de caducidad porque él mismo se la marcó cuando fue reelegido meses atrás. Puntualiza que accedió a la presidencia ante la falta de candidatos, pero que ya entonces pensó en cómo articular su relevo. “Ya lo tengo y cuando sea conveniente diré quién será mi sucesor”. Fernández garantiza que cerró conversaciones con una persona que habría aceptado la dirección de Xuncoga, algo que se materializará de cara al próximo año; es decir, que en principio permanecerá en el cargo hasta diciembre.
Sobre los impagos de otras cooperativas denunciados por Camiñas, motivo por el que, dijo, había frenado por pagos como medida de presión, Manuel Fernández insiste en que existe un acuerdo con estas dos entidades para liquidar el pasivo. Lamenta, eso sí, la falta de empatía y de solidaridad de Camiñas con compañeros de otras cooperativas que puntualmente puedan pasar por dificultades para afrontar sus compromisos. Esto mismo, alega, le aconteció a O Rodo y nadie actuó en estos términos contra la principal sociedad agroganadera dezana.
