Los centros escolares de Galicia afrontan las últimas semanas de plazo para poner en funcionamiento sus aulas virtuales. Se trata de una nueva modalidad educativa que se desarrolla de manera complementaria o independiente a las formas tradicionales de educación que surge de la introducción de las nuevas tecnologías y en especial de la utilización de la red como punto de encuentro. Estas aulas cobrarán importancia en caso de un confinamiento en el que se vea afectada la comunidad educativa, ya que sería un instrumento para que los escolares puedan continuar con sus estudios y mantener el contacto con sus profesores.
En el caso de los centros escolares de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes, muchos han implantado estas aulas virtuales desde el inicio de curso, por lo que ya cuentan con unos primeros meses de experiencia con esta nueva herramienta. “Es un proceso en el que estamos todos ahora mismo”, explica la directora, del CEIP Xesús Golmar de Lalín, María Jesús López Campos. “No hay un plan para ponerlo en marcha pero en nuestro caso ya está funcionando para estar preparados en caso de un confinamiento”.
En el caso del CEIP de Figueiroa por ejemplo trabajan en estos momentos para ponerlo en marcha, con la vista puesta en un plazo que finalizaría en diez días. Necesitó de una formación previa por parte del profesorado y ahora se trabaja con estas nuevas aulas con los propios alumnos.
El colegio de Codeseda por ejemplo mantuvo en los últimos días reuniones con los padres para informarlos sobre esta nueva herramienta, que también pondrán en breve en marcha.
Los centros de enseñanza secundaria también trabajan ya en su mayoría con estas aulas virtuales ya operativas.
