Después de la celebración del pasado sábado, el próximo volverá a repetirse esta ubicación, que no causó problemas, según el gobierno local, en parte porque la afluencia de vendedores no fue excesiva, aunque sí se notó un aumento de clientes, muchos de ellos sorprendidos por este regreso temporal al centro.

En todo caso, aunque el traslado dejará de tener efecto a partir del día 4 y no hay nada decidido para el futuro, tampoco estaría previsto un cambio de fecha. La feria se desarrolla en Rafael Areses desde 2010 y el último intento municipal de traslado se registró en 2016, cuando el Concello trató de haber un "experimento" de celebración en los terrenos de la antigua Tafisa, solo por un día y a modo de prueba.

La idea fue rechazada de plano por el colectivo de vendedores ambulantes ante el temor de que se aplicara de forma permanente en un lugar que no es de su agrado.