El edil del BNG de A Estrada, Xosé Magariños, acaba de registrar en el Concello una moción de rechazo a la “pírrica inversión en la variante” prevista por el Gobierno central del socialista Pedro Sánchez. La intención de la formación frentista es someter a la consideración del pleno de la corporación municipal estradense dicha moción para que las distintas fuerzas políticas que lo conformen “rechacen claramente estos presupuestos del Estado”, instando, además, a los representantes políticos de PP, PSOE y En Marea elegidos por las circunscripciones gallegas a formular una enmienda a la totalidad del proyecto estatal de presupuestos y a establecer “una negociación con el Gobierno de Pedro Sánchez que incorpore, como mínimo, una inversión semejante” a la que contemplaban los presupuestos de 2009.

Y es que, en opinión de los nacionalistas, las inversiones contempladas por el Gobierno central para la variante de A Estrada son “pírricas”, como el BNG ya denunció en las últimas semanas. Entiende que “los 100.000 euros previstos” para esta infraestructura constituyen “un insulto para un Concello que lleva décadas clamando por esta obra que, a pesar de la alternancia política en el Gobierno” del Estado “nunca se acaba de concretar en hechos claros”. En el contexto actual, desde el Bloque se entiende que estos presupuestos del PSOE pactados con Unidos Podemos-En Marea son también una bofetada a los vecinos” de A Estrada.

Consideran los nacionalistas que la variante de A Estrada es “una infraestructura imprescindible para nuestro desarrollo social y económico, que debe tener un compromiso claro por parte del Gobierno de Madrid” que “vaya más allá de los 100.000 euros” al objeto de garantizar que “en menos de cinco años tengamos esta infraestructura en funcionamiento”.

Si la variante es una infraestructura imprescindible, a juicio de los nacionalistas, en el orden de prioridades en el término municipal de A Estrada, el BNG también sitúa como otras prioridades el rescate de la autopista AP-9 y el compromiso de “acabar” con lo que considera “la estafa de los peajes”. Del mismo modo, entiende que otras prioridades que urge llevar a cabo son derogar la prórroga de ENCE y fijar un calendario para el traslado de esta empresa de la ría de Pontevedra, pagar la “deuda del Estado con Galicia en materia de dependencia” -cifrado en 186 millones de euros, según los nacionalistas” y comprometerse a activar una tarifa eléctrica gallega que rebaje la factura de la luz a particulares y empresas.