El municipio lalinense ha multiplicado por catorce el censo de su población inmigrante en tan sólo una década, puesto que si en 1998 había 76 personas empadronadas, según el departamento de estadística del concello, en el pasado mes de febrero la cifra ascendía a las 1.085 personas, "que supoñen o 5,1% dos 21.254 residentes no municipio", según apuntaba ayer la edil de Emigración, Paz Pérez, en la presentación del borrador del primer Plan Local de Integración e Convivencia Social.

El documento, "que estará listo no último trimestre do ano e que responde a unha aposta do programa electoral do PP", estará vigente hasta 2011, y contempla intervenciones para la integración de los inmigrantes y emigrantes retornados en un total de diez áreas. Por ello, y a pesar de estar auspiciado desde el área de Emigración y coordinado por dos técnicos vinculados a Servizos Sociais -Beatriz Alvarellos y Carlos Presas- el programa requiere la participación de técnicos de cultura, juventud o desarrollo local, entre otros.

La mayoría de los inmigrantes proceden de Rumanía y Bulgaria, así como de Portugal, entre los que predomina los residentes masculinos. En cuanto a los nuevos vecinos extra-comunitarios, destacan las mujeres procedentes de Brasil, Colombia, Argentina o Venezuela. La primera intervención con este colectivo a su llegada al municipio pasa por la información sobre los recursos sociales existentes, "xa que a onde primeiro acoden", apuntaba Beatriz Alvarellos, por lo que se creará en la web municipal una sección de Inmigración donde aparezcan dichas prestaciones. A la dotación de una plaza de mediador intercultural se suma, por otra parte, un estudio de las necesidades sanitarias de cada usuario, a la par que se garantiza "un acompañamento médico e asesoramento psicolóxico dende o Centro de Información á Muller", apuntaba el trabajador social, Carlos Presas.

Alojamiento provisional

En vivienda, se habilitará el alojamiento provisional en albergues o pensiones para personas con escasos recursos, a la par que se mediará para el acceso a una vivienda, mientras se impulsan políticas municipales de vivienda social.