Pocos equipos de Tercera división pueden presumir de contar con un futbolista internacional en las categorías inferiores de la selección española. El cántabro Ángel Díez, nuevo inquilino de la portería del campo de O Couto, lo fue durante su etapa sub16 y sub17. Llega para cubrir el hueco que dejó vacante Patricio Guillén, ahora en Santiago, pero sobre todo para "formar parte del crecimiento de un club joven pero con mucho potencial".
- ¿Qué tal la aclimatación estos primeros días?
- Muy bien, está siendo muy sencilla, todos me lo están poniendo muy fácil.
- Su fichaje se fraguó en muy poco tiempo...
- Sí, yo acabé con el Portugalete el 30 de junio y a la semana siguiente ya me llamaron. Todo fue muy rápido, una vez recibida la proposición del Ourense hablé con Currás y por la tarde ya le di el sí.
- Pasa de pelear por ascender a Segunda B a un equipo que parte con un objetivo más modesto, la permanencia y luego ya veremos. Habrá quién piense que es un paso atrás...
- Para nada, lo primero que tienes que apreciar es en qué equipo de Tercera juegas. Y en ese sentido, la UD Ourense tiene un proyecto muy atractivo. Es un club con pocos años de historia pero con una idea irrenunciable de seguir creciendo. Eso inclinó fácilmente la balanza a la hora de decidirme.
- Pasa del grupo vasco, en el que se proclamó campeón con el Portugalete, al gallego, en el que hay tortas por los cuatro primeros puestos...
- Es que el grupo gallego es uno de los más fuertes, si no el que más. Recuerdo la eliminatoria de ascenso con el Alondras y nos lo hicieron pasar muy mal a pesar que ganamos la ida en su campo.
- No le es extraño jugar en el campo de O Couto...
- No, ya vine un par de veces en Segunda B. Sé de la historia del desaparecido CD Ourense, de la mucha gente que metía en el campo. Es un estadio bonito para jugar.
- ¿Cuántos aficionados solía meter el Portugalete?
- Menos que aquí seguro. Es verdad que como íbamos muy bien los aficionados se volcaron en el último mes y medio, pero durante la temporada habría unos quinientos seguidores. Sí, ya me han dicho que aquí tengo que multiplicarlo al menos por tres. Eso me gusta porque durante los noventa minutos de cada partido te hacen sentir que no estás jugando en Tercera división, que estás jugando en una categoría superior. Ya quisieran muchos equipos de Segunda B meter en el campo a una décima parte de los que mete el Ourense.
- Padre desde hace muy poco tiempo, ¿ha venido solo o se ha traído a la familia?
- Con la familia, estamos todos aquí desde el primer día y ya digo que la aclimatación ha sido sencilla, para los tres. Tengo un niño de tres meses y el pobre todavía no se entera de nada. Sí, habrá que comprarle una equipación, va a crecer como un ourensano más.
- Ya sabrá que la portería era una posición muy consolidada en el equipo...
- Sí, Pato es un gran guardameta, me he enfrentado a él bastantes veces en Segunda B. Yo vengo a hacer mi trabajo lo mejor posible, sería una muy buena señal que nadie se acordara de él.
- ¿Se ve jugando de nuevo las eliminatorias por el ascenso?
- ¿Y por qué no? Pero lo primero es lo primero, si en la jornada 25 estamos con opciones vamos a ir a por ello. Se supone que arriba van a estar Compostela, Bergantiños, quizá el Fabril. Y luego hay muchos equipos más que pueden llegar. Pero por encima de todo, este equipo tiene que seguir creciendo.
