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O Couto mete respeto

La UD Ourense se mantiene invicta en su campo, donde solo ha perdido cuatro de los 71 partidos de liga desde que llegó en diciembre de 2014 - "Tenemos una afición que da puntos", afirma el portero Pato Guillén

El portero de la UD Ourense Pato Guillén observa un despeje aéreo de Germán ante el Ribadumia, en O Couto. // Agostiño Iglesias

El 4 de febrero se cumplirá un año de la última derrota en el campo de O Couto de la Unión Deportiva Ourense, la única que encajó la pasada temporada en Preferente. El conjunto ourensanista sale a tropiezo en casa por año natural desde que estrenó su hogar, en diciembre de 2014, contra el Palmés. En Tercera Regional los ganó todos, en Segunda, ya en 2015, perdió con el Santa Teresita y, en 2016, fue superado por el Allariz; en 2017 le ganó el Bande, ambos partidos de la Primera Galicia. En total, cuatro derrotas en los 71 partidos de liga que albergó el campo de O Couto.

En los diez partidos que ha jugado como local en Tercera División (el undécimo fue en el exilio de Celanova, y tampoco perdió aunque encajó un tanto del Arosa), la UD Ourense solo ha recibido cuatro goles: dos del Arenteiro y uno de Alondras y Villalbés. Es una tendencia que también se mantiene desde la fundación del club. Con Pato Guillén en la portería, en 17 de los 28 encuentros disputados en O Couto, no encajó.

El meta uruguayo, protagonista de la última victoria sobre el Ribadumia, incluye el factor campo en las claves de la extraordinaria trayectoria de un equipo que solo ha perdido uno de los 20 duelos de esta liga. "El equipo tiene compromiso, sacrificio y humildad y, a mayores, tenemos una afición que da puntos. Cuando la grada aprieta, nos hacemos fuertes en casa. Es fundamental y espero que no perdamos nada de eso hasta el final. Hay que seguir igual, ayudar al compañero, que ninguno sea más que el otro. Y encarar lo que queda de la misma manera, por ahí pasan las claves. Es algo que no se puede negociar, y en ese aspecto lo estamos haciendo bien", afirma.

El portero unionista reconoce que, una vez más, el resultado no estuvo nada claro: "Tuvimos la iniciativa, aunque sí es verdad que no se materializó en ocasiones claras, sobre todo en la primera parte. Sabíamos que eran un equipo que juega bien, con jugadores como para no estar donde está. Primero a la contra y también en algunas fases teniendo la pelota, nos hicieron daño. En la segunda parte, metimos una marcha más, un poco más de ritmo, el partido fue más de ida y vuelta, pero tuvimos paciencia, no nos volvimos locos. Cuando llega el minuto 80, si no lo has ganado, no lo puedes perder, y en un balón parado el partido se abrió y sumamos tres puntos importantes".

Dos paradas suyas de mérito, en remates a bocajarro, evitaron un palo y que quizás se rompiese la racha en casa. "Por suerte, las paré -recuerda Pato-. Son dos jugadas que pudieron significar ponerse en desventaja y el fútbol tiene esos momentos claves que pueden marcar un partido. La tuvimos de nuestro lado y sirvió para no empezar perdiendo, eso es positivo. Y después de cuatro jornadas, conseguimos no encajar. En los últimos partidos no era lo habitual y volvimos a esa seguridad entre comillas, porque nos crearon ocasiones".

La UD Ourense fue el único de los diez primeros que abrió la segunda vuelta ganando, lo que para el portero anuncia dificultades que entran en los cálculos: "Por lo general, las segundas vueltas suelen ser más apretadas porque los de abajo se ven apurados y los equipos se refuerzan. Todos se juegan algo. Nuestra victoria nos dio una ventaja buena en relación con los que vienen por detrás, pero quedan 18 jornadas. Es un mundo. Era importante ganar para coger un colchón y seguir arriba, pero puede pasar de todo".

Pato invita a no perder la perspectiva desde la plaza de promoción que ocupan: "Estás pendiente de cómo quedan los rivales, no nos vamos a engañar, pero veo que vamos ahí como veo que van 20 partidos y son 38. Está bien verse ahí, pero es anecdótico. Ahora toca tranquilidad y pensar semana a semana. No nos podemos hacer ilusiones. Queda jugar contra rivales importantes, cruces directos, y hay que seguir igual, euforia cero".

El calendario vuelve a empinarse desde el domingo (17.00 horas) en Somozas. "Es un campo complicado. Desde que perdieron en casa con el Ourense CF no han vuelto a perder, cosechando puntos importantes. Van levantando y tienen jugadores importantes. Habrá que ir alerta, sin confianzas, como hasta ahora para sumar", expone el meta uruguayo.

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