La Unión Deportiva Ourense visita esta tarde (18.00 horas) al Antela en el campo de A Moreira en el penúltimo encuentro preparatorio para los de Fernando Currás. Las pruebas se acabarán mañana en otro escenario con solera en la provincia, el de San Rosendo, contra el Sporting Celanova. El central unionista Pablo Corzo considera que son dos amistosos muy útiles para afinar la puesta a punto. "Son campos de dimensiones grandes y de hierba natural, como la mayoría de los que nos encontraremos este año, y enfrente habrá dos equipos competitivos con los que podremos preparar la semana de liga, que ya toca", asegura el zaguero.
En su balance de la pretemporada, el de Nogueira de Ramuín ve al equipo bien encaminado: "Van saliendo cosas que se están trabajando y físicamente cada vez estamos mejor. No al cien por cien, nos queda camino que hacer, pero vamos en la dirección correcta". La pareja de centrales que forma como Diego Vieytes ha aprovechado el tiempo para consolidarse tras una gran segunda vuelta en Preferente. "Con Vieytes me entiendo bien y nos complementamos porque tenemos características diferentes, pero el míster es el que tiene que decir quien juega y nosotros ponérselo difícil y que nos elija. El grupo que tenemos ayuda a que te entiendas bien con el que tienes al lado", explica Corzo.
Deberán ofrecer las mejores prestaciones ante delanteros reputados como el del primer rival liguero, Hugo Soto. "La competitividad aumenta y la Tercera siempre es igualada. Puedes ganar o perder en cualquier campo y hay más calidad, tanto con jugadores contrastados como otros que vienen de abajo y quieren dar el salto. Te paras a mirar y no hay rival débil. Ni uno. Tenemos que pensar en el partido a partido y a ver dónde nos colocamos", apunta Pablo Corzo.
Tras dejar el Ourense, Pablo Corzo ya experimentó lo que era el debut en Tercera tras ascender de Preferente con el Barco. Acabaron sextos. "Algunos de los cambios más grandes es el ritmo de juego, la visión que pueden tener los jugadores del centro del campo y de la mediapunta y la definición de los delanteros. En otras categorías, cuando un jugador se queda ante el portero, la puede mandar fuera, pero en Tercera lo normal es que no fallen si cometes un error. También las defensas son más fuertes y contundes y el ritmo y la intensidad aumentan".
El reencuentro con la categoría motiva al zaguero de la UD Ourense, sea cual sea el rival o el destino, apostilla. "Me apetece mucho jugar en Tercera en general. Hay campos atractivos, y después están A Malata y San Lázaro, que son estadios míticos, pero también equipos tan buenos como el Bergantiños. Es uno de los partidos que me gustaría jugar porque mi mejor amigo está allí (Baleato). En cada campo hay algún detalle y en los 19 lo pasaremos bien", augura.
Pablo Corzo espera que, una temporada más, la UD Ourense se vea respaldada por su afición tanto en O Couto como en los desplazamientos. Les pide también que tengan paciencia y sepan sufrir. "Las cábalas no son nada buenas. No hay que olvidar que el año pasado, durante un momento de la temporada, la gente estaba decepcionada y al final se consiguió el objetivo. Con paciencia y trabajo se demostró que se podía conseguir y este también puede ser un año bueno, pero siendo realistas, porque somos un recién ascendido en una Tercera muy complicada. A la gente poco más le puede decir, que apoyen como hasta ahora y que siga creciendo el club. Tener 600 socios antes de empezar la liga es una pasada", destaca Corzo. En su haber, en el camino a Tercera, quedará aquel balón de gol que sacó en Atios. "Creo que también llegaba Pato, pero me tocó a mí y se consiguió el objetivo, que era lo que se pretendía. Aquello queda en vídeo para el recuerdo", indica.
