Una temporada de sobresaliente

De "sobresaliente". Así calificaba ayer el entrenador del Alondras, Antonio Fernández, la temporada completada por sus jugadores. El club cangués fue capaz de clasificarse por segundo año consecutivo para la fase de ascenso a Segunda B, algo que no había conseguido hasta ahora, y consiguió alcanzar la segunda ronda. Ahora toca pensar en la planificación deportiva de la próxima temporada, que tendrá que agilizarse porque a mediados de julio el equipo debería estar ya comenzando la pretemporada. La primera incógnita a resolver es si Antonio Fernández seguirá en el banquillo de O Morrazo, algo sobre lo que de momento no se pronuncia. "Estos son días para hablar con la directiva, analizar y reflexionar. No se deben tomar decisiones en caliente", apunta.

A la hora de valorar la temporada Fernández destaca el "mérito" de estar por segundo año consecutivo en una fase de ascenso. "Creo que el equipo estuvo gran parte del año por encima de sus posibilidades, hay que tener en cuenta que clubes con más presupuesto que nosotros no pudieron clasificarse", subraya. El técnico destaca sobre todo la "conexión" entre la plantilla. "El éxito radica en el buen entendimiento, en que fuimos una familia", afirma. A la altura de la jornada diez, cuando los rojiblancos eran decimoquintos, con solo dos triunfos y cinco derrotas, era difícil imaginar que pudiese alcanzar la cuarta posición. "Superamos las dudas del inicio, creo que no empezamos la temporada con el mejor ritmo posible, pero el equipo fue creciendo, analiza.

Dos rondas

El Alondras afrontó la fase de ascenso quizás en su mejor momento y tras recuperar a la práctica totalidad de su plantilla. El año pasado cayó en primera ronda ante el Langreo lastrado por el primer partido (0-3), pero aún así fue capaz de forzar una prórroga. En esta ocasión fue capaz de llegar más lejos. El sorteo emparejó en primer lugar a los cangueses con un histórico como el Mensajero y los de Antonio Fernández lograron apear a los canarios (1-0 en la ida y 1-1 en la vuelta).

Contra el Portugalete pesó el 1-2 del partido en O Morrazo. "No fuimos inferiores a ellos. Creo que se llevaron un resultado demasiado abultado. Ayer [por el domingo] jugábamos con muchas urgencias, pero el equipo compitió y dio la cara", alaba el entrenador del Alondras. Una sensación parecida a la de la directiva. "Nos queda un sabor agridulce, pero estamos muy orgullosos. Superamos una ronda, competimos bien en la segunda. En el partido de vuelta, a pesar del gol que recibimos, tuvimos nuestras opciones con un mano a mano de Yelco o con un penalti que no nos pitaron", valoran.

La plantilla está desde ayer de vacaciones y unos y otros pendientes de su futuro. La junta directiva tenía ayer la habitual reunión de los lunes, un encuentro en el que estaba previsto empezar a planificar la próxima campaña. "No tenemos mucho tiempo, nos queda apenas un mes antes de que el equipo vuelva a los entrenamientos", indican. En este tiempo hay que valorar altas, bajas y, sobre todo, decidir quién estará al frente del equipo. Lo previsible es que durante esta semana se resuelva esa incógnita para continuar con la toma de decisiones. La junta directiva reconoce que será difícil retener a Antonio Fernández. Su trabajo y el excelente rendimiento ofrecido por el Alondras durante estas dos temporadas han llamado la atención de otros equipos, por lo que es probable que reciba otras ofertas.