La victoria ante el Bande ha dejado plenamente satisfecho al técnico del Beluso, José María Rial, que valora casi tanto los tres puntos como la forma en que estos se consiguieron. "El equipo volvió a recobrar sus señas de identidad", subraya. Lo cierto es que el conjunto buenense no se había encontrado cómodo en los tres duelos anteriores, a pesar de haber sumado en ellos un triunfo a domicilio ante el poderoso Atios. "Influyó el calendario, que nos enfrentó a dos gallitos como Atios y Areas y a un Valladares que es de los equipos más complicados en su campo", razona el preparador, que también añade otra causa: la pretemporada.

"Hay jugadores que por trabajo u otros compromisos que no la han podido hacer con regularidad y lo estamos notando. A medida que vayan entrado y cogiendo la forma se verá otro estilo", señala. Con todo, la situación distaba mucho de ser preocupante. "Había tranquilidad, sabíamos que las cosas iba a salir. El Bande no es el del año pasado, pero había que jugar bien y salimos con las ideas claras. El camino a seguir es este", sentencia. Rial apunta asimismo que el venir de una extraordinaria temporada ha podido influir. "Fuimos novenos, los primeros de los de abajo, y las expectativas que te creas son diferentes, aunque se lo digas la cabeza te traiciona. Si es parte de los motivos nunca lo vamos a saber", afirma.

El futuro está claro para el preparador cangués. "Ahora el equipo tiene que crecer. Mantenemos un 90 por ciento de futbolistas del año pasado y nos exigimos mejorar cada día, aunque el fútbol es caprichoso y a veces con una mejor plantilla quedas peor clasificado", manifiesta. Mantener el salto dado frente al Bande es el camino. "Veníamos de dos partidos en los que no éramos capaces de combinar en campo contrario, y el domingo fue un aluvión de ocasiones", relata el técnico.

La preocupación también está en ir recuperando a todos los efectivos que aún se encuentran en la enfermería. El meta Buyo podría tener una fractura en un dedo del pie, lo que le supondría estar alrededor de un mes de baja. Por ello el club está barajando la posibilidad de contratar a otro portero para no quedarse solo con Kevin en esa posición. Dani (ex del Juvenil de Ponteareas) y Brais (que ya estuvo en el Bahía hace años con Rial) están entrenando con el Beluso y uno de ellos podría tener ficha en breve.

Nacho, que sufrió un golpe ante el Areas, ha empezado a entrenar de nuevo e Iván ya trabaja con normalidad de cara a poder debutar en dos o tres semanas. Quien ha dejado el equipo de forma definitiva es Dieguito.