El Club Olimpic vilagarciano regresaba del XXII Campeonato Internacional celebrado en Pontevedra con un buen manojo de medallas conseguidas entre 1.500 deportistas que se dieron cita en el evento. En total fueron19 preseas entre la categoría base infantil, cadete, juvenil y junior.
Así, en modalidad de combate, en categoría infantil femenino para competidoras de menos de 34 kilogramos, para la taekwondista del Olimpic, medalla de plata para Dafne Piñeiro Ballesteros, y preseas de bronce para Inés Pérez Suárez, pre-cadete femenino para menos de 30 kilos, y Xiana Bugallo Ballesteros, pre-cadete de menos de 37 kilogramos.
Modalidad técnica
En la modalidad técnica, medalla de bronce en individual en la categoría masculina juvenil para Rodrigo López Aragunde, y en la categoría trío junior femenino, consiguieron la plata Lara Gutiérrez Vidal, Cristina Pintos Rey y Nerea Suárez López.
Y en "freestyle", que es el estilo basado en la técnica de taewondo combinada con música y coreografía, Sara Fernández Canosa obtuvo la medalla de bronce en individual junior femenino, que repetía presea luego en parejas junior, esta de oro, con Marcos Mera Barcala.
Finalmente la participación del Olimpic vilagarciano se completaba con una exhibición infantil protagonizada por los jóvenes taekwondistas Ariadna Cuevas, Miguel Cuevas, Sara Fernández, Pablo Barreiro, Xiana Bugallo, Dafne Piñeiro, Inés Suárez, Alba Lago y Laura Lago, que fueron galardonadas con la medalla de plata tras su brillante actuación en el campeonato de Pontevedra.
Satisfacción, por tanto, por parte del entrenador del Olimpic, Miguel Cuevas, por el gran nivel ofrecido por sus taekwondistas en este campeonato internacional de Pontevedra, y que congregaba a deportistas de todo el ámbito nacional, así como algunos llegados desde otros países como Portugal y Francia.
Un Miguel Cuevas que emplaza a los suyos ahora para la nueva cita de este mes de noviembre, que será los días 23 y 24 en el Open Internacional Vila de Moaña, y que reunirá en su caso a 540 competidores en el pabellón de Reibón, con representación de la flor y nata de del taekwondo gallego, además de otros llegado desde Asturias, Castilla-León y Portugal.
Una cita donde el taekwondo vilagarciano quiere volver a brillar sobre el tatami, objetivo que se marcan gracias al intenso trabajo de los últimos años.
