El nuevo Asmubal barrió al Xallas con un parcial 1-8 de salida, dispuesto a mostrar su ambición sobre la cancha de Fontenla. Y eso que en el primer tiempo el equipo apenas sí robó balones, pero sí se sacrificó los suyo en el 5-1 defensivo. En ataque, aunque no corrió apenas la contra -únicamente materializó dos goles al contragolpe en este período- el equipo sí se mostró efectivo en el ataque posicional. Un 5-15 marcaba una renta ya de 10 goles, y que luego al descanso se traducían en un 5-17.
Pese a tener el partido sentenciado el equipo tuvo hambre en la segunda para seguir cobrando ventajas de escándalo, hasta una máxima de 24 goles con un 11-35 en el último tramo, y que se quedaba en el 13-43 final.
Víctor Garrido se mostraba emocionado por el recibimiento recibido en Santa Combas, tanto él como sus jugadores Iván Campos y Dani García, por cuando los tres -él mismo como técnico- militaran la pasada temporada en el Xallas dejando aquel equipo a las puertas del ascenso
Dos goleadas, con 34 y 43 dianas anotadas en dos jornadas, y una de diferencia de goles de +40 goles, que convierten a los meañeses en líderes de la liga.
