El Deportivo ha tenido que recurrir a su dueño, la entidad financiera Abanca, para poder hacer frente a sus obligaciones ya que no puede cumplir con ellas “por sí mismo fuera del fútbol profesional”, según explicó en la Junta de Accionistas su presidente, Antonio Couceiro.

La Asamblea de socios se celebró de manera telemática, con la asistencia de 31 personas, un total de 41 accionistas presentes y representados y un quórum del 76,693% (Abanca controla el 76,65 %).

El presidente del club explicó que cerró el último ejercicio contable el pasado 30 de junio con más de 11 millones de pérdidas, “no puede hacer frente a sus obligaciones por sí mismo fuera del fútbol profesional”. El Consejo de Administración indicó que se estudiaron tres alternativas para afrontar ese déficit: una ampliación de capital, nueva financiación bancaria o un préstamo participativo. La primera se desestimó por el bajo apoyo que tuvo la anterior ampliación; tampoco se consideró un nuevo crédito por la situación de “incertidumbre” al no saber la categoría en la que estará el club la próxima temporada, así que se decantaron por un préstamo participativo.

Los accionistas fueron informados de que el club ha formalizado ya un préstamo de 3,3 millones de euros, que fue ratificado en la Asamblea, y la directiva también ha obtenido el visto bueno de los accionistas, con el respaldo de Abanca, para poder solicitar otros 8,7 millones de euros en nuevos préstamos participativos que serán suscritos con esa entidad financiera.