Después de proclamarse campeona de la Copa de España en Mallorca junto a su compañera Nicole van der Velden, las sensaciones siguen mejorando de cara a la consecución de la plaza olímpica. "Somos un equipo joven y tenemos aún mucho margen de mejora", asegura Patricia Suárez, que en los próximos meses competirá en Mallorca, Weymouth, Marsella, Japón y Nueva Zelanda, escenarios clave para sus aspiraciones olímpicas. "Estamos muy contentas con nuestra evolución y con los resultados que estamos obteniendo. Hemos formado el equipo en junio del pasado año y la evolución es cada vez mejor, estamos ya casi dentro del top 10 mundial y estamos bastante por delante de los demás equipos españoles, con lo que la situación es bastante buena", resume la regatista del Real Club Náutico de Vigo.
Patricia Suárez leva anclas y fija su rumbo en Tokio. No hace ni un año que la viguesa y Nicole van der Velden unieron sus destinos consiguiendo entrar en el equipo preolímpico tras la disputa del Europeo de Gydnia (Polonia). En 2016 Patricia Suárez se proclamó junto a su hermana Alejandra campeona del mundo de vaurien en Viana do Castelo. Fue una apuesta puntual, pero en su mente había ya un proyecto olímpico. "Yo venía de navegar en la clase juvenil de 420, donde estuve en los equipos nacionales acudiendo a varios Mundiales y Europeos. Navegar con mi hermana fue algo puntual que surgió un año en concreto, pero en mi cabeza siempre estuvo la clase olímpica y, por supuesto, los Juegos. La Federación Gallega me dio la oportunidad de navegar en 49er FX y empecé aquí en Galicia", explica.
Su actual compañera, Nicole Van der Velden, venía de competir en los Juegos de Río representando a su país de origen, Aruba. Lo hizo en la clase Nacra 17. "Ella se mudó a España y buscaba alguien con quien formar equipo en 49er FX. En esos momentos mi proyecto con la tripulante con la que estaba entonces no tuvo continuidad. Estábamos medio colgadas las dos y la Federación Española decidió juntarnos", añade. "La verdad es que prácticamente no nos conocíamos de nada, pero empezamos a probar un poco juntas y las cosas fueron muy bien. Ella tiene mi edad, pero ya posee experiencia en unos Juegos y me transmitió mucha tranquilidad y también profesionalidad, porque es una persona dedicada, que sabe cuál es el camino. Es lo que me hacía falta, un punto más de seriedad, saber cuál es nuestro objetivo y darlo todo por ello".
La conexión fue casi inmediata. "Empezamos en junio e hicimos una regata juntas en Kiel en la que nos fue muy bien. Estábamos en periodo de prueba aún y en el Europeo quedamos en el puesto 12º y ya conseguimos entrar en el equipo preolímpico, lo cual fue una tranquilidad con respecto a ayudas y a todo. Podíamos empezar a trabajar en serio", reconoce. Después llegó el Mundial de Dinamarca. "Quedamos en el puesto 15º y nos quedamos a punto de conseguir la plaza para los Juegos", indica. "Nos quedamos a las puertas y fue una pena, pero también sirvió para que la Federación Española nos pusiese en el punto de mira como equipo con posibilidades para clasificar a España para Tokio".
Así que el Mundial de Nueva Zelanda, en noviembre de este año, se antoja decisivo para sellar ese billete olímpico. "Ahí se adjudican otras seis plazas para otros seis países y creo que las posibilidades para España son bastante elevadas", anuncia. "Aún queda mucho trabajo para llegar y se nota un montón que el resto de países están trabajando mucho también. Creo que el Trofeo Princesa Sofía y el Europeo de Weymouth, en mayo, serán dos citas importantes para ver el nivel de los rivales. Son dos citas que nos ayudarán a saber cómo vamos evolucionando con respecto a los otros equipos y a saber en qué puesto nos situamos".
En el verano se trasladarán a Japón. "Un año antes se hará una regata en el mismo sitio de los Juegos y solo va un equipo por país", indica la viguesa. En la cita de abril de Mallorca y en el Europeo se designará qué equipo acudirá ese verano a Japón. Los demás equipos también viajarán, pero solo para entrenar. "No tiene por qué, pero ahí darán un poco la idea de qué equipo quieren que vaya a los Juegos", subraya. "Va a ser como un ensayo general un año antes. La selección sería más tarde pero creo que sí que será importante que intentemos ganar esa plaza para seguir avanzando lo máximo posible", anuncia.
En su camino hacia Tokio pugnan por la plaza olímpica con Támara Echegoyen, oro en los Juegos de Londres en Match Race y cuarta en la cita de Río en 49er FX. "Estamos muy contentas de poder hacer equipo con ella. Támara es una persona con mucha experiencia y ya lleva dos citas olímpicas a sus espaldas. También ha empezado con una tripulante nueva al mismo tiempo casi que nosotras y no dudamos de que va a ser una rival muy fuerte con la que luchar por la plaza, pero ahora creo que tenemos que pensar en trabajar más como equipo para poder clasificar a España. Una vez conseguida, ya cada una jugará sus bazas". "Trabajando como equipo (del que también forman parte las hermanas Carla y Marta Munté) creo que podremos avanzar más con respecto al resto de equipos y poder situarnos en ese top ten, asegurar la plaza para España y ya luego que vaya la mejor, obviamente", indica.
Fruto de ese trabajo en equipo Patricia Suárez reconoce que "la evolución ha sido más rápida de lo previsto". "También es verdad que al principio la evolución es mucho más rápida; ahora viene lo complicado para poder escalar aún más", advierte. "Estamos en el momento de afinar. Todo el mundo quiere estar ahí y será cuestión de pequeños detalles, pero lo bueno es que creo que tenemos aún mucho margen de mejora".
Durante el año han estado en la costa portuguesa buscando unas condiciones similares a las que se encontrarán en Japón. En enero también estuvieron en Miami. "En Portugal hay mucha ola, mucho viento y con unas condiciones como las que nos vamos a encontrar en Japón", a donde irán por vez primera en verano: "Aunque no estuviésemos seleccionadas para la regata previa a los Juegos, habrá también una World Cup que será abierta y la haremos todas".
Alemania, Suecia, Polonia, Francia? Son algunos de los países a los que no les quitan ojo en su esprint hacia Tokio. En Nueva Zelanda se van a repartir seis plazas y España apura sus opciones. "Las posibilidades de clasificarnos son bastante grandes", dice Patricia Suárez, que confía en sacarse un billete olímpico que ya acaricia su compañero de club Nico Rodríguez en 470. "Si consigue la plaza Nico estará para ganar una medalla", asegura.
