Raúl Beiró disputará el domingo su segunda Vig-Bay. Debutó en la prueba en 2015 cuando llevaba poco tiempo de entrenamiento. A los pocos meses de calzarse las zapatillas Beiró bajó casi 40 kilos, desde entonces su progresión atlética ha sido espectacular. "El año pasado hice 1:24", apunta. Este año no descarta mejorar. Su marca personal en la distancia es de 1:21, lograda en el medio maratón de Pontevedra, pero reconoce sentir cierta debilidad por esta carrera. "Empecé para ponerme en forma y necesitaba un incentivo" y en la Vig-Bay encontró la motivación que necesitaba. Habitual en las populares de la zona, Beiró mejora tiempos de forma sorprendente y está preparado para repetir experiencia en la meta de Baiona. Destaca como uno de los puntos más especiales "la llegada a la zona de A Ramallosa".