Los municipios de Baiona, Nigrán y Gondomar se unen para iniciar el camino hacia un futuro de prosperidad en común de la mano del Consorcio de la Zona Franca de Vigo. El delegado del Estado en el organismo estatal, David Regades, y los tres alcaldes –Carlos Gómez Prado, Juan González y Paco Ferreira– firmaron ayer un acuerdo para poner en marcha un plan estratégico para la comarca del Val Miñor.

El proyecto arrancará con un diagnóstico de cada municipio de forma individual y en conjunto. Se analizará la economía, el tejido empresarial y la situación social, demográfica, tecnológica o medioambienal, así como la repercusión de la crisis del COVID en cada uno de ellos. Toda la información se sintetizará en un informe de debilidades, amenazas, oportunidades y fortalezas (DAFO) para determinar el potencial de los municipios miñoranos y su área.

El estudio será participativo y recogerá las sugerencias de entidades públicas y privadas relevantes, analizará casos de éxito y modelos similares en el mundo para inspirar ideas para la zona.

Apoyo público y privado

A partir de ahí, se pondrá en marcha un plan operativo con propuestas de colaboración, instrumentos o ayudas públicas que se pueden llevar a cabo para desarrollar ideas concretas, también en el ámbito público-privado.

Regades hizo hincapié en la “hoja de ruta que permitirá que el proceso no se quede en un documento, sino que se convierta en realidad” e indicó que un comité de seguimiento desde Zona Franca se encargará de supervisar los avances.

Los alcaldes ven en este proyecto una oportunidad de cooperación entre administraciones para sacar el máximo provecho de sus localidades de cara a un futuro más organizado en el que garantizar el asentamiento empresarial y la creación de puestos de trabajo.