La Guardia Civil detuvo a dos vecinos de A Guarda como presuntos autores de cerca de una veintena de robos en una empresa del municipio dedicada al sector de la calderería, donde sustrajeron más de 2.000 kilos de recortes de acero inoxidable almacenados en el interior de la nave, a la que accedían con un mando a distancia preparado para la apertura remota de puertas. También hurtaron 1.500 litros de gasoil. Las investigaciones de la Guardia Civil concluyeron con la recuperación de parte del material robado en una chatarrería de la comarca del Val Miñor, donde se intervinieron cuatrocientos kilos en recortes de acero inoxidable.