La peatonalización del antiguo "viaducto de Madrid" lleva décadas como uno de los deseos más ambiciosos de los redondelanos. La idea ya se propuso en los años ochenta del siglo pasado y en 1992, cuando gobernaba el socialista Xaime Rei, se presentó un proyecto firmado por el arquitecto catalán Salvador Tarragó, encargado por la Xunta, en el que contemplaba un paseo ajardinado sobre la estructura ferroviaria, con un ascensor en forma de columna rodeado de una escalera de caracol para facilitar el acceso desde el centro urbano. Sin embargo, nunca llegaría a hacerse realidad a pesar de que en años posteriores siempre formó parte de las promesas electorales.

También en 2004 se presentaría un estudio realizado por el departamento de Patrimonio del Estado, en el que se planteaba la construcción de un paseo peatonal transparente sobre "viaducto de Madrid" para convertirlo en uno de los principales referentes turísticos de la localidad, un proyecto que recuperaría años después, en 2009 el entonces alcalde, Xaime Rei, para presentárselo a los responsables de la Dirección General de Patrimonio del Estado cuando estudiaban la rehabilitación integral del puente ante el estado de deterioro que presentaba.

Ahora el Partido Popular recupera en su programa este viejo sueño de transformar el puente ferroviario en un paseo acristalado sobre los tejados de la villa. Una actuación que llega con el viaducto en su máximo esplendor, después de que en 2015 finalizara la rehabilitación de toda su estructura de hierro para devolverla a su estado original, promovida por la Dirección General de Patrimonio del Estado con una inversión de 3,8 millones de euros.

El candidato popular y actual alcalde, Javier Bas, explica que su propuesta para el viaducto pretende transformar la estructura ferroviaria en un paseo para los peatones como punto de confluencia de las dos rutas del Camino de Santiago Portugués, la interior y la costera, que se unen en Redondela. Bas está convencido de que esta actuación posicionaría a la localidad en uno de los principales puntos de referencia de la ruta jacobea, y destaca que solo durante el pasado pasaron por la villa redondelana más de 60.000 peregrinos.