Los residentes de la zona de O Muro, así como los peregrinos que cada día acceden al centro urbano de Redondela por este punto de la carretera N-550, ya no tendrán que jugarse la vida para cruzar este peligroso vial. El alcalde redondelano, Javier Bas, firmó la semana pasada la adjudicación de los trabajos de instalación de un paso de peatones regulado con dos semáforos en este tramo, que supondrá una importante mejora en la seguridad de los peatones que transitan por esta zona en la que se ubican numerosas naves de empresas.

La instalación de este semáforo era una demanda histórica, puesto que los vecinos de la zona llevaban años reclamando mejoras en la seguridad vial tras producirse atropellos. El Ministerio de Fomento instaló a principios de 2017 señales de advertencia de peligro por la presencia de peatones, incluyendo un botón que accionaba la intermitencia de tres luces en los extremos de la señal, aunque tanto los vecinos como desde la Agrupación de Electores (AER) calificaron la medida de "insuficiente e inadecuada". Este punto, que forma parte del Camino de Santiago, es también paso obligado de cientos de peregrinos a diario en su ruta a Redondela.

El permiso para la instalación de estos semáforos no fue sencillo ya que las negociaciones con Fomento "fueron muy duras", aseguran desde el gobierno local. El Concello financiará la obra al considerarla necesaria para los vecinos. El presupuesto asciende a 33.000 euros.