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REDONDELA

Los bancos marisqueros del interior de la ría reabrirán el lunes al remitir la toxina

El cierre de las zonas de extracción mantiene sin ingresos desde hace una semana a más de 300 mariscadores de Redondela -La apertura también afectará a la zona 1 de Barra y Cíes

Los bancos marisqueros del interior de la ría reabrirán el lunes al remitir la toxina

Los más de trescientos mariscadores a flote de la cofradía de pescadores San Juan de Redondela retomarán la actividad extractiva el próximo lunes.

El patrón mayor, Clemente Bastos, informó ayer de la reapertura a partir de la próxima semana de los bancos del interior de la ría (zona 3), así como los de Barra y Cíes (zona 1), al haber remitido la toxina que obligó a su cierre en los últimos días. Sin embargo se mantendrá cerrada la zona 2.1, que comprende Cangas y Canido, a la espera de la realización de nuevas analíticas por parte del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar). Bastos confía en que estos banco puedan también normalizar su situación a partir del miércoles, con lo que se podría faenar en toda la ría.

Los barcos del marisqueo a flote de las cofradías de la ría de Vigo se mantienen amarrados desde hace una semana debido a la incidencia de la bacteria en las zonas de extracción de moluscos bivalvos, que obligó a cerrar los bancos. Esta medida afecta en Redondela a unas doscientas embarcaciones iniciaron a principios de octubre la campaña hasta el 31 de mayo.

El patrón mayor destaca que hasta el momento del cierre la temporada estaba siendo bastante buena, con muchas capturas de almeja japonesa, aunque por otra parte advierte de la escasez de otras especies como la babosa, la rubia y la fina, que alcanzan una mayor cotización en lonja.

La incidencia de la toxina que obligó al cierre de los bancos durante toda esta semana ha supuesto un duro revés para el sector marisquero, obligado a mantenerse en casa sin ingresos. "La administración debería tener esto en cuenta y ahora buscar fórmulas como un incremento de las cuotas o de los días de trabajo para compensar las pérdidas, porque esto afecta a muchas familias que dependen de faenar a diario para comer", apunta Bastos.

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