A pesar de que el solar en el que se ubicará el nuevo pabellón de deportes se utiliza desde hace tres años como zona de aparcamiento provisional con 350 plazas, la nueva infraestructura no ocupará todo el espacio. El gobierno local reconoce que se perderán plazas, aunque también se contempla mantener una zona de estacionamiento.

La parcela de A Marisma tiene una superficie total de 9.000 metros cuadrados, mientras que el edificio ocupará 3.446 metros, por lo que quedarán libres las dos terceras partes del terreno.

La actuación cuenta con un presupuesto de 2,3 millones de euros y contempla un pabellón polideportivo dotado de vestíbulos, ascensor, dos oficinas, dos vestuarios de árbitros, cuatro vestuarios de jugadores, seis aseos, un gimnasio, dos almacenes de material, cantina, graderío fijo para 568 espectadores y otras gradas retráctiles para otras 192 personas. El tamaño de la pista es de 48 por 32 metros, apta para competiciones oficiales de distintos deportes.

El pabellón está financiado en un 70 por ciento por fondos europeos Feder que marcan como requisito que las obras estén rematadas en 2014.