"Vigués de Teis". Es una de las frases que pronuncia Alberto Lago Álvarez, que el pasado lunes cumplió ochenta años. Y lo hizo rodeado de sus amigos y compañeros del Club Shotokan. Allí mantiene viva su pasión por el kárate, iniciada hace ya 35 años. Una larga trayectoria deportiva en la que ha logrado algunos títulos a nivel gallego y ha competido en diversos lugares de España.
En la actualidad sigue con disciplina sus entrenamientos. "Me estimula, me siento bien, ayudado por mis compañeros en el gimnasio. Todo es perfecto", recalca. Y no piensa dejarlo. Aquellos que le conocen dicen que posee una buena técnica en las modalidades de kata y kobudo, sus dos especialidades preferidas. Pero al mismo tiempo también se ha formado como árbitro. Otra disciplina que le apasiona.
Alberto Lago destaca que "el deporte debería ser algo fundamental en la vida de las personas". Y desvela que fue Fernando Álvarez, el acreditado entrenador del Club Shotokan, una de los que más le ha ayudado.
Ya no piensa en ganar títulos y confiesa que "estoy retirado del trabajo, pero no del deporte. Y seguiré así". En la sede del club, al que acude varias veces a la semana, le tienen un aprecio especial. Siempre tiene un consejo para los más jóvenes. "Es muy atento y amable, como siempre", dicen de él.